Entre Mundos

Capítulo 40 Concurso de talentos

Al día siguiente, cuando el ruido sonó indicando el comienzo del recreo, Luna vio como Bianca y Karma salían de clase y, rápidamente, corrió para alcanzarlas. Cuando por fin llegó a donde se encontraban, Luna extendió el papel con la historia a Bianca mientras decía:

—Ya me lo he leído —dijo Luna.

Bianca cogió la historia. Y, tanto ella, como una nerviosa Karma (que se sentía como si se hubiera quitado la armadura ahora que Luna sabía todo), oyeron lo que Luna decía a continuación.

—Voy a ir a la cafetería, ¿queréis venir?

Karma asintió con la cabeza efusivamente, lo que hizo que Bianca riera. Sin duda alguna Karma había estado desesperada por volver a hablar con Luna, así que, las tres se dirigieron a la cafetería. Se encontraban en la cola para pedir cuando Luna pronunció una frase habitual de su boca.

—Me aburrooo...

Karma no pudo evitar alzar una ceja y Bianca no pudo evitar reír. Luna al oír a Bianca reírse no pudo evitar fruncir el ceño.

—No veo lo gracioso, ¿y si jugamos a un juego? —continuó Luna.

Karma volvió a alzar una ceja, pero esta vez Bianca no se rió, sino que preguntó.

—¿Qué juego? —tras realizar esa pregunta Luna puso una sonrisa que el gato de "Alicia en el país de las maravillas" no podría superar.

—¡Preguntas Disney! —al decirlo Luna levantó ambos brazos en dirección al cielo, o más bien al techo de la cafetería.

Bianca no pudo evitar ver con gracia a Karma cuando se dio con la palma de su propia mano en la frente. Sin duda, ahora mismo Karma se estaba arrepintiendo de haberle dicho a Bianca que pusiera lo de Disney en la historia, debería haberse imaginado que Luna haría algo así.

—A ver... ¿princesa favorita? La mía es Rapunzel —Luna fue la que formuló la pregunta, empezando así el juego.

—A mí me gusta Bella —y justo después de que Bianca respondiera, tanto Bianca como Luna giraron la cabeza en dirección a Karma.

—No pienso responder.

Luna puso cara triste y Bianca pronunció un "porfa", lo que provocó que Karma rodara los ojos y susurrara.

—Mérida.

Bianca asintió con la cabeza concordando con que Mérida molaba.

—Podríamos hacer una escena de teatro para el concurso de talentos —esa era Luna.

Se acababa de acordar de lo que les había dicho su tutora. Uno de los últimos días de clase, harían un concurso de talentos. Sin duda alguna, Luna quería hacer una escena. Sin duda alguna, el concurso de talentos parecía muy interesante. Sin duda alguna, el concurso de talentos sería muy divertido. Sin duda alguna, el concurso de talentos sería una buena forma de perder clase. Sin duda alguna el concurso de talentos sería un buen motivo para volver a cantar. Sin duda alguna, el concurso de talentos serviría para que por fin una pequeña cría de águila cantarina saliera del cascarón y alzase el vuelo. Sin miedo. Porque si tienes miedo a la hora de volar te estrellas. Y esa pequeña águila sería una estrella que intentaría no estrellarse.

1. Grace

2. Leo