𝒞𝒶𝓅𝒾́𝓉𝓊𝓁𝑜 𝒟𝑜𝒸𝑒

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𝒥𝑒𝑜𝓃 𝒥𝓊𝓃𝑔𝓀𝑜𝑜𝓀

— Por favor Jeon, vete.

— No me iré.

Seguí besándola y apretándola de la cintura, ya tenía una gran erección que quería salir de mis pantalones.

Sin despegar nuestros labios caminamos al sofá, y la subí a mi regazo, la tomé de la cintura y comencé a moverla sobre mi polla dura, se sentía tan bien, nuestras intimidades rozaban, nuestros labios pegado y las lenguas jugando entre sí.

Quería llegar a más pero ella finalmente detuvo lo que estábamos haciendo.

— No voy a caer Jeon, ademas estás tomado, estoy segura que mañana no recordarás nada, si quieres puedes quedarte o como gustes.

Se fue a su habitación y escuché que puso seguro a su puerta.

No estoy borracho, claro que recordaré lo que haría con ella, solo tomé dos cervezas y soy muy tolerante al alcohol, quiero hacerla mía, una y otra vez.

Fui a su habitación y toqué la puerta, hasta que ella salió, estaba en pijama, una muy linda.

— Lo siento —nunca había pedido perdón, a nadie.

— Pensé que te habías ido —me miró.

— ¿Como hacerlo?, me vuelves loco Tn.

La tomé de la cintura suavemente y la acerqué a mi.

— ¿Puedo besarte, tocarte, hacerte mía?

Otra nueva faceta de mi, jamás había pedido algo, siempre las tomo y ya, pero no sé por qué con ella es diferente, me nace pedírselo.

— Bésame, haz lo que quieras conmigo, así es como tú eres, solo usas a las mujeres, úsame y después de lo que pase, no me moleste más.

Tn  me besó, un beso que no esperé que me diera, pero al final lo acepté, la pegué más a mi y caminamos a su cama donde la recosté.

Tengo su permiso para hacer lo que quiera, como un vampiro sediento de sangre me apoderé de ella, besé y lamí su cuello, me deshice totalmente de su ropa, en segundos estaba desnuda para mi.

— Por dios —mordí mi labio.

— Si vas a follarme solo hazlo y ya.

Me saqué la ropa y mi miembro salió desplomado de mi bóxer.

Volví a besarla, disfrutando de esos labios carnosos y jugosos.

Rocé mi miembro en su intimidad y sin más la penetré.

Ambos soltamos un gemido de placer y comencé a moverme. Mis manos apretaron su cintura, me sentía en la gloria, cerré mis ojos disfrutando de este magnífico momento. 

— Estás tan apretada —gemí ronco.

Mis estocadas eran lentas para disfrutar de su intimidad mojada y caliente, no lo estaba haciendo como lo hago, simplemente estaba disfrutando y que ella también lo disfrutara.

Luego de unas estocadas ella estaba arriba de mi, sus gemidos aguados me calentaban más de lo que ya estaba.

— Jeon, agh!!

— Joder Tn.

Apreté sus caderas y la ayudé a saltar más, su respiración comenzó a descontrolarse y los gemidos eran cada vez más seguidos, señal de que estaba por correrse.

— Mmh! Mierda Jeon, me vengo

— Vente para mi.

Pasé mi pulgar por mi lengua y luego a su clítoris, le di suaves círculos hasta que se corrió, seguí embistiéndola y salí de ella para correrme, Tn aún encima de mi comenzó a masturbarme hasta que me corrí en sus manos.

𝑄𝑢𝑖𝑒𝑛 𝑑𝑖𝑟𝑖́𝑎 𝑞𝑢𝑒 𝑎 𝑝𝑎𝑟𝑡𝑖𝑟 𝑑𝑒 𝑒𝑠𝑎 𝑛𝑜𝑐ℎ𝑒, 𝑇𝑛 𝑠𝑒𝑟𝑖́𝑎 𝑚𝑖 𝑝𝑒𝑟𝑑𝑖𝑐𝑖𝑜́𝑛...

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