NUEVA VIDA

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Capítulo #20

¿Qué tal si empezaba una nueva vida con ella? Era tan subreal que sintiera esa felicidad al estar a su lado.
Dentro de mis inseguridades era que traerla a casa fuera un caos total, por algún rastro de mis actividades que pudiera encontrar Elizabeth, o por mis padres, quienes con su personalidad sin filtros y estrictos, incomodarían a mi amada, pero para mi paz mental, todo salió perfecto.
Nuestras largas charlas me reafirmaban lo maravillosa que es, algo distraída, pero muy brillante.
Me sentía en las nubes, mi ánimo jamás estuvo mejor. El único momento que me paralizó fue pasar de una incomparable charla con Eli, a voltear mi rostro por la venta del auto, y sentir que el bosque me golpeaba directo a la cara, como si me empujaron al abismo de la realidad. ¿Cómo estábamos de camino a un maravilloso picnic, y la muerte me helara la sangre pensando en si la perdiera?
Siendo sincero, entré en un segundo de transe al ver el bosque y lo que representaba, solo que ir manejando me impidió perderme en todos los escenarios trágicos, si Eli descubrira todo.
Para mi desgracia fui muy obvio, porque me preguntó lo que me sucedía y envuelto en mis fantasmas reales, inventé que mi padre me narrava historias de fantasmas ficticios sobre los bosques. Me sentí incómodo, y desvíe la charla sobre nuestro idílico viaje.
Pasamos un bello momento en aquel pasto de intenso verde y el rostro de Elizabeth perfilado por el atardecer. No existía nada ni nadie más que nosotros y la frescura de la brisa.
Se que tuvimos una tarde expectacular, le propuse regresar a casa de mis papás, que estaba más cerca que la suya, pero de inmediato me dijo que prefería ir a su casa. Mis mejillas estaban ardiendo, mis orejas parecían lava, la vergüenza llegó en un segundo, al pensar en lo imprudente que pude haber sonado con la propuesta de ir a casa de mis papás, que ya después de analizar unos segundos, fue una pésima opción.
No quería siquiera mirarla por mis nervios, pero ella fue como siempre, muy amable:

- Me encantaría acompañarte, pero tengo una reunión de trabajo. Estoy buscando algo nuevo por acá, porque pretendo quedarme por bastante tiempo, tal vez la próxima vez podamos compartir más, ¿porque sí habrá próxima vez, verdad?

- ¡Claro! Disculpa mi imprudencia, la pasé tan bien, que ya estoy absorbiendo tu agenda.

Sonrió muy gentil: - Eres un gran amigo, hasta estado para mí desde que toda mi vida se convirtió en una tragedia peor de lo aue imaginé, y agradezco el tiempo que paso contigo, porque eres mi distracción a los malestares de la vida.

La personalidad de Elizabeth fue tan calida, me calmaba los impulsos más extraños que había tenido escondidos. Pensé que sentía un genuino amor por ella, y tal vez debía ordenar todo para iniciar una nueva etapa con ella. Mi determinación la llevé a la acción luego de ir a dejar a Eli a su casa.

Dos pasiones que ahora se habían convertido en el sentido de mi vida, que no podía mezclar, porque si perdía a una, perdía todo. Entonces decidí que mis investigaciones las llevaría a cabo en un marco aceptable social y legal.
Tenía un sin fin de documentos repletos de mis avances científicos que organizaría para continuar trabajando en laboratorios más capacitados y con más recursos. Tal vez debía cambiar mis técnicas, pero mostrando algunos de mis avances, muchos laboratorios aceptarían apoyarme, pero mi padre jamás lo haría si tiene que ver con ciencia forense.
Decidí primero renovar mi refugio en el bosque, hacer un tipo de escondite subterráneo para no tener todo en la cabaña, y sabía que tenía una aliada segura, porque la hechicera me ayudaría sin duda.
Después me llevaría lo más importante a mi casa de soltero, donde iba a acoplar una habitación como un pequeño laboratorio, sin tener cosas incriminatorias.
Me desaría de todas las muestras biológicas, los restos y todo lo que podría ser perjudicial. Al final, ya tenía registro de muchos procedimientos en mis libretas y documento.
Incluso pensé en escribir un libro con mis allazgos después de aventarme en mi nueva vida con Elizabeth y mi trabajo como investigador.

Rápido puse manos a la obra, me dirigí al bosque, la bruja, como la mayoría de las veces rondaba y me saludaba, pero esta vez aproveché y le dije que me ayudara transportar con un carretillo varias cosas de la casona y ella aceptó. Siendo sincero ya eramos amigos, pero a la vez no confiaba demasiado en ella como para haberla dejado entrar más allá de unos centímetros de la puerta y esta no fue la excepción. Además, ella siempre comentaba cosas sin sentido, que de vez en cuando me ponían nervioso.

-Debes dejar que la vida tome su rumbo, muchacho malcriado, estás apresurando el ciclo de la vida.

-Y tú deberías ayudarme a mover mis cosas en tu carretillo y taparlo con la manta, mientras organizo el espacio aquí adentro.

- ¿Estás dispuesto a perderla?

Me quedé inmóvil unos segundos:
- ¿Perderla? ¿A qué te refieres?

-¿Que no vez que el amor siempre está al borde del odio?

Jamás había hablado con ella sobre Elizabeth, jamás había mencionado lo del papá o algo sobre mi vida muy personal, ¿a caso me vigilaba? Solo imaginar que este vieja loca podría destruirlo todo, se apoderó de mí una furia enorme, un asombro que me dejó confundido

-¿Qué estás diciendo? ¿Cómo carajo te diste cuenta de ella? - le grité iracundo.

-¡Basta, deja esa actitud! ¿Creés que no me doy cuenta que estás enamorado? Vives murmurando sobre ella, ya no frecuentas el bosque como antes.

-¿Murmurando? - dije todavía más sorprendido- ¿Dices que hablo de ella siempre?

-Pues vives hablando de "ella" y preguntando ¿qué haría o qué pensaría ella? Es justo lo que un hombre enamorado y más que enamorado, trastornado haría.

-Solo es una amiga por ahora y debo cambiar todo esto para poder tener una vida con ella.

-¿Creés que limpiando este lugar limpiarás tu consciencia? Porque lo que alteras en el pasado, ya no lo puedes cambiar en el futuro.

-¿qué no vives hablando del destino? Ella está aquí para mí y lo que he hecho en el pasado y hasta ahora, ha sido por un bien mayor. Además, ya deja de alterarme, me pones más tenso.

-Muchachito, te digo, hay cosas inevitables en la vida, pero tu destino, está escrito con varias opciones, que llevan a un mismo cause, al cause de la muerte, pero teniendo una vida digna.

-Si la vida llega a un mismo cause ¿para qué tratar de remar contra corriente? Y si yo escogo mi destino en la vida, entonces escogo el camino que me lleve a Elizabeth.

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