❝¿𝐕𝐞𝐧𝐠𝐚𝐫𝐦𝐞? 𝐇𝐚𝐛𝐞𝐫 𝐩𝐞𝐫𝐝𝐢𝐝𝐨 𝐚 𝐦𝐢 𝐚𝐥𝐦𝐚 𝐠𝐞𝐦𝐞𝐥𝐚 𝐲𝐚 𝐟𝐮𝐞 𝐛𝐚𝐬𝐭𝐚𝐧𝐭𝐞 𝐦𝐢𝐬𝐞𝐫𝐢𝐚❞
Alessandra se aleja del caos y la violencia que su apellido le trajo después de que su gran amor muriera aquella trágica noche q...
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Perspectiva narrativa Desconocido
El hombre canoso avanzó con cautela por el extenso pasillo, sus pasos resonaban en el silencio del lugar, cada uno de sus movimientos eran medidos y precisos. La luz tenue de las lámparas creaba sombras alargadas, dándole al ambiente un aire opresivo.
Al llegar a la habitación del fondo, se detuvo frente a la puerta. Con manos temblorosas, giró el pomo y empujó la puerta ligeramente. Al entrar, se encontró con su líder de espaldas, observando la puesta del sol desde la ventana.
—Señor, un equipo logró localizar a Bill Kaulitz cerca del punto muerto—El hombre sintió un escalofrío recorrer su cuerpo. La tensión en la habitación era palpable.—Su gente tiene la intención de atacar la bodega abandonada, como usted lo predijo.
—¿Alguna vez te dije que tengo un medio hermano, Jonas?—El castaño dejó el vaso de vidrio sobre el escritorio y colocó sus manos sobre la madera. Su subordinado negó con la cabeza, sin comprender por qué sacaba el tema tan repentinamente.—Creí que el segundo matrimonio de mi padre fracasaria, hasta que esa perra quedó embarazada de él cuando yo tenía cuatro años. Jamás consideré a ese pequeño escurridizo cómo parte mi familia, lo odiaba.
Jonas se quedó en silencio, observando cómo el hombre caminaba por la habitación con una mirada pensativa. Su lider emanaba una aura oscura y amenazante.
—Lo intenté asesinar antes de desaparecer, pero su madre me detuvo y fue ella quien recibió un disparo en la garganta. El estúpido niño se quedó en shock, con los ojos bien abiertos—Las risas del castaños aparecieron de forma inesperada. Jonas repitió su acción, aunque este lo hizo con sarcasmo.—Preferí dejar al mocoso con vida para que se culpara el resto de su vida. Era lo mínimo que merecía por haber nacido.
—¿Sabe algo de él en la actualidad?—El hombre pasó saliva con dificultad, sintiendo la habitación sofocante y el aire pesado.
—Mi pequeño hermanito se convirtió en un justiciero, un estúpido justiciero que terminará cayendo cómo los altos mandos de las luciérnagas el día de hoy—Su mandíbula se tensó y el sonido de su voz se volvió distante. La idea de ver caer a sus enemigos lo llenaba de placer.—¿No te parece irónico? Los monstruos nos llaman monstruos a nosotros. Tom Kaulitz se ha encargado de torturar y asesinar a mi gente durante dos años sin piedad alguna. Creo que es momento de que reciba un poco de sufrimiento por parte de la corte. Jörg me dejó una tarea y no pienso fallarle.
—Las luciérnagas jamás dejarán de ser estúpidas, Ryan. Bill siempre se ha preocupado por la integridad de los civiles y los suyos. Esta vez no será la excepción—Una sonrisa siniestra se formó en el rostro del adulto, quien se acercó con paso lento.—Ninguno de sus amigos debe sospechar que se trata de una trampa. Los niños regresarán, pero la mitad de ellos pagará las consecuencias por culpa de los gemelos.
