Nunca imaginé que al llegar a aquel lugar mi destino se torcería de una manera tan macabra. Mi vida se convirtió en un laberinto de engaños y oscuros secretos, en el que pensaba encontrar paz y protección para mis demonios internos. Pero en lugar de...
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Ripper | Cranio
La sangre, sustancia espesa y roja que fluye por las venas de todos los seres humanos, es esencial para la vida. Para mí, observar y tocar esa sustancia era una experiencia excitante en todos los sentidos. Me sentía adicto a ella y no podía imaginarme privarme de ella. Si no veía sangre, experimentaba una sensación de ansiedad, como si fuera un fumador sin su dosis de nicotina. Esta obsesión por la sangre me hacía perder la cabeza, aunque debo admitir que nunca he sido una persona completamente cuerda.
El líquido escarlata manchaba mi ropa y mis manos, seguramente también había algo en mi rostro. Una sonrisa siniestra se escapó de mis labios al ver el sufrimiento agonizante que había causado en ese hombre que suplicaba entre lágrimas que lo dejara ir. Era demasiado tarde para eso, su hora había llegado y nadie podía evitarlo.
━ ¡Porfavor, ten piedad de mi! No pense en lo que hacia, dame otra oportunidad, Ripper. ━ Dijo mi apodo entre lagrimas y sangre, lo cual me excito mas. ━ Déjame demostrarte que puedo hacerlo.
El hombre era Liam Stevens, un violador liberado hace aproximadamente 4 meses. Yo lo había sacado de la cárcel para que trabajara para mi organización, con dos simples condiciones: encontrar a una mujer específica de la cual debíamos ocuparnos y no volver a cometer violaciones. A pesar de haber cumplido con la primera condición, Liam desobedeció la segunda al violar a la mujer, lo cual me repugnaba. Aunque yo podría ser considerado un monstruo, los violadores son los seres más despreciables de este mundo.
Por esta razón, me encontraba disfrutando el doble de su sufrimiento, yo era un asesino que tomaba placer en quitar vidas, como un niño saboreando un helado. Sin embargo, este acto en particular despertó en mí sensaciones extrañas, una mezcla de desprecio y adicción que se apoderaban de mi ser.
━ Liam, eres la peor escoria de la tierra, además de un desagradecido. Me jugue la organización para sacarte de la carcel y ¿Asi me lo pagas? ━ Le clavé el cuchillo en la pierna presionando con fuerza, este grito del dolor. ━ Eso, grita para mi, quiero que grites más.
Giré el cuchillo en su pierna, clavándolo hasta el hueso y provocando gritos de dolor que brotaban desde lo más profundo de su garganta. Una sonrisa macabra se dibujó en mi rostro mientras veía sus ojos llenos de terror, y sentía mariposas revoloteando en mi estómago por la emoción.
Decidí detener el dolor porque quería asegurarme de que no perdiera la conciencia. Quería que estuviera plenamente consciente de todo lo que le iba a hacer, ya que las mujeres eran seres maravillosos y no merecían ser profanadas por su repugnante e inadecuada conducta. A diferencia de él, yo no era alguien que matara mujeres. Podía infligirles dolor de una manera completamente distinta, sin necesidad de mutilarlas ni desmembrarlas.
━ Esto era una prueba y tu no la has superado, te espera algo peor que la cárcel por esto.
━ Por favor, no. Dame otra oportunidad. Esta vez lo haré bien, me controlaré. ━ Lo mire a la cara, era como mirar a un cordero asustado. Sabía que mentía, sus ojos me lo decían. ━ Por favor, Ripper.
