Love in the Glade [TMR Newt]

Capítulo 10

Narrador omnisciente

Marie suspiró, caminando hacia Thomas. Acababan de salir de su juicio, y la decisión había sido que pasarían una noche en el Hoyo, pero después se convertirían en Corredores.

-Conque Corredores, ¿eh? -dijo Marie cuando llegó junto a Thomas.

-Sí -contestó él -. Llevo esperando este momento desde que Newt me contó lo del Laberinto.

-Yo no, de hecho, quería cualquier cosa menos ser Corredora -respondió la chica -. Pero la otra noche en el Laberinto me ha hecho cambiar de opinión, parece ser.

-Eso veo.

Hubo un momento en silencio entre ellos, pero no incómodo, es más, se sentían a gusto.

-Ve a hacer lo que quieras o si no espérame -dijo Marie -. Voy a ver a Newt y decirle las novedades, tal vez tarde un poco.

-Está bien, iré a ver qué está haciendo Chuck -contestó Thomas.

Marie se dirigió a la enfermería con paso rápido. Cuanto antes llegara más tiempo podría pasar con Newt, cuya compañía le parecía muy agradable y la reconfortaba. Era su mejor amigo allí.

Entró en la enfermería y al dirigirse a la cama en la que estaba Newt, vio que el chico estaba dormido.

Se ve tierno, pensó Marie mientras una sonrisa aparecía en sus labios.

Le daba pena despertarlo, pero finalmente le acarició suavemente para no asustarlo, y Newt despertó del sueño.

-Hola, Marie -dijo con una sonrisa mientras se senataba en la cama, frotándose los ojos -. ¿Qué haces aquí?

-He venido a verte y comprobar cómo estás -dijo la chica -. Y también contarte las novedades.

-Pues yo estoy bastante bien -contestó Newt, agradecido por la preocupación de Marie-. Hace un rato Jeff me dijo que esta noche ya debería poder volver a mi cabaña. No haré mucho movimiento, eso sí, para que la herida no vuelva a abrirse. ¿Tú cómo estás?

-Bien -dijo ella -. Bueno, al menos hasta recordar la fría noche que me espera.

-Será tu castigo, ¿no? -adivinó Newt.

-Si. A los dos nos ha tocado una noche en el Hoyo -confirmó Marie.

-¿Nada más? -preguntó Newt, extrañado.

-Nada más -dijo Marie, sonriendo -. Incluso nos han premiado.

-¿Cómo que os han premiado? -preguntó Newt cada vez más extrañado.

-A partir de mañana Thomas y yo seremos Corredores -contestó Marie.

-¡¿Qué?! -gritó Newt. Marie no entendía por qué, pero el chico parecía estar preocupado.

-¿Hay algo malo con eso? -preguntó Marie, extrañada.

-¡Sí! ¡Muchas cosas! -gritó Newt.

Marie estaba cada vez más confundida, Newt parecía... ¿asustado?

-Newt, ¿qué te pasa? -preguntó -. Pensaba que Thomas y yo te agradábamos.

-Si, no es eso, yo... -dijo, después se frotó la cara y me miró de nuevo -. No es por Thomas ni por ti. Los dos tenéis lo que hace falta, de eso estoy seguro. Pero créeme, ser Corredor te desgasta emocionalmente con el tiempo.

-¿Qué? -dijo Marie, sorprendida por lo que Newt le estaba diciendo. ¿Cómo podía eso ser verdad? Y si lo era, ¿cómo lo sabía él?

-Por favor, créeme -contestó Newt -. Piénsalo bien antes de salir al Laberinto, Marie. Yo sé mejor que nadie lo que puede pasarle a ciertos Corredores.