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——Dios mío...¿Quién sería capaz de hacer eso...?——
Preguntó el Jamaicano una vez le contaron el estado del zimbabuense. ¿Quién sería capaz de hacer tales cosas?

——Solo un monstruo...——
Dijo el camerunés con Tono serio. El también estaba impactado.

——¿Tienen noticias?——
Dijo el agente entregando un café a cada uno.

——Solo que Sudáfrica ya esta más tranquilo. De Zimbabue aún no sabemos nada.——
Dijo Jamaica encogiéndose de hombros.

——Oh...——

Se quedaron el silencio. Nadie sabía que decir en estos casos. Estaban bastante intranquilos. Sobre todo Jamaica.

——¿Podríamos pasar a ver a Sudáfrica?——
Preguntó el jamaicano.

——Creo que si——

Luego de preguntar, lograron entrar en la habitación donde estaba él Sudafricano.

——Sudafrica....¿Que tal estás?——
Preguntó Jamaica.

El Sudafricano no contesto, solo estaba viendo al piso, pensativo. El agente puso su mano sobre el hombro del otro.

——¿Cómo está él?——
Preguntó con un tono decaído, incluso algo lastimero.

——Aun...aún no nos dicen nada. ——
Contestó Camerún.

——Pero no te preocupes...seguro va a estar bien...¿Verdad?——
Mencionó el jamaicano. Nadie contestó
——...¿Verdad?...——

La habitación volvió a quedar en silencio.
De pronto, una enfermera entro en la habitación.

——Ustedes fueron los que trajeron al señor Zimbabue, ¿No?——
Preguntó la mujer.

——Si, fuimos nosotros.——
Dijo Jamaica con tono nervioso.

——Acompañenme, por favor ——
Pidió con tono amable.

Se miraron entre todos, y siguieron a la mujer, aunque el Sudafricano nisiquiera sabía si podía salir, solo quería ver el estado de su amigo.

Entraron en la habitación, y pudieron ver al zimbabuense.

——Esta dormido de momento. Pero está estable...——
Presionó sus labios, dejando ver solo una línea más clara. Giró su vista al Sudafricano.
——Va a estar bien. El que sea un country lo salv...ayudo a qué no fuera grave el daño.——
Explicó.

El Sudafricano se acercó al zimbabuense. Se veía tan tranquilo...no quería ni imaginar por todo lo que había pasado para que estuviera en el estado en el que lo habían encontrado.

——¿Qué tanto te hicieron, Zim?——
Pensó mientras lo analizaba.

【...】

El angoleño, el malgache y el suazi estaban buscando el menor. El suazi era el que se notaba más preocupado. El malgache estaba nervioso, y el Angoleño... simplemente no podia concentrarse.

——¡Mozambique!——
Exclamó un pequeño Angoleño buscando a su hermano.
——¿¡Dónde estás!?——

En Busca De Un Africano | CountryhumansDonde viven las historias. Descúbrelo ahora