uh, hi
sé que no hay ni un alma leyendo esto, pero tenía ganas de escribir algo rápido y mevie siempre será mi comfort ship, me trae muchos recuerdos bonitos <3
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Situado después de la primera mitad de Descendientes 2
La puerta de la limusina se abrió justo enfrente de Auradon Prep, y de ella bajó una valija púrpura acompañada de un par de botas del mismo color, embarradas de lodo y con la suela a punto de desprenderse.
Habían transcurrido 6 largos meses desde que alguien en Auradon había escuchado algo sobre la hija de Maléfica. Sus amigos y profesores habían respetado su decisión de volver a la Isla y prefirieron no insistir más. Ben, Evie, Jay y Carlos regresaron sin éxito de ese lugar, pues sin importar lo que le dijeran o hicieran, Mal no tenía planes de cambiar de opinión.
Aunque eso había quedado atrás.
Al parecer lo único que Mal necesitaba era cambiar de aires, literalmente. Por alguna razón, el viento olor a fruta podrida de la Isla la había hecho entrar en razón, concluyendo que había tomado una decisión sumamente apresurada al abandonar a las personas que más le importaban solo por la presión de mantener un título que ni siquiera le importaba.
Echaba de menos a todos por igual, pero había solo una persona a quien necesitaba.
Evie.
La había extrañado cada minuto que estuvo lejos de ella y eso solo le hizo tener todo más claro. Extrañaba percibir su shampoo de mora azul al abrazarla, las pláticas nocturnas que se extendían hasta horas de la madrugada, su risa cada que decía un mal chiste y simplemente su compañía. No podía estar un día más alejada de ella.
Mal comenzó a caminar con paso apresurado por los jardines principales del castillo, intentando que las rueditas de su maleta no hicieran tanto ruido en el pavimento para pasar lo más desapercibida posible. No fue muy útil, pues su cabello brillante y con color saturado llamaba la atención de todos los estudiantes, quienes no paraban de murmurar entre ellos.
Algo bueno debía salir de los estudiantes cotilla. No habían pasado ni 5 minutos del rumor de que la ex-casi-reina-de-Auradon estaba de vuelta y ya había llegado a oídos de dos hijos de villanos que no podían esperar para verla de nuevo.
—¡MAL! —gritaron al unísono dos voces inconfundibles.
Mal giró su cabeza hacia la derecha al escuchar su nombre, para encontrarse con dos chicos, uno con gorra y otro con su inconfundible cabello blanco, corriendo hacia ella a máxima velocidad. Por lo visto, tantos entrenamientos alrededor de la pista de atletismo habían dado frutos.
—¡Chicos!
Mal los esperó abriendo los brazos. Afortunadamente ambos pudieron frenar a tiempo y recibir el abrazo, aunque estuvieron a punto de tirarla hacia atrás.
—¡No puedo creer que sean ustedes! —exclamó, sin poder dejar de sonreír.
—Wow, miren quién regresó —habló Jay, separándose del abrazo aún aturdido y con una sonrisa que mostraba todos sus dientes—. ¿Cuándo...?
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¿Quién necesita un príncipe? | Mevie One-Shots (1)
FanfictionLas amistades tan íntimas e incondicionales a veces ocultan más de lo que se cree.