Running With the Wolves

Capitulo 3

-Si necesitas adrenalina yo te puedo llevar en mi moto, no cometas una estupidez por favor- intente detener su paso

-No funciona Tea, tengo que meterme en problemas o tener adrenalina en mi sistema contigo no lo tendré- negó yendo a esos chicos

No podía dejarla ahí, no puedo dejarla sola. Charlie me mataría si algo le pasa.

Fui corriendo por mi moto, afortunadamente estaba a una calle. Puse en marcha el motor y manejé hacia donde se había ido.

La busque con la mirada, estaba mas adelante montada en la moto de un tipo. Acelere a fondo para llegar a ellos, pero antes de cruzar una calle se detuvieron de sopetón.

Me baje de la moto corriendo a Bella -Vámonos- la jale del brazo en dirección a mi moto.

-Pero Tea- protesto

-Pero nada Isabella- la subí al asiento poniéndole el casco -Es la primera y ultima vez que haces una tontería como esa- me subí delante de ella arrancando a la casa.

-Mi camioneta se quedó allá Tea- reprocho a mis espaldas

-Eso debiste pensarlo antes de hacer esto Isabella, eres increíble de verdad- negué continuando el viaje en silencio.

Al llegar a la casa le quite el casco una vez que se había bajado dejándola marchar a la casa. Me pase las manos por la cara exasperada.

Bella si no me matas del susto te mato del enojo

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- ¿Bella que traes en la parte de atrás? - íbamos de camino al taller de Jacob, la manta cubría algo que no me había querido contar.

-Solo unas cosas para Jake, no es nada peligroso- mi miro por unos segundos para regresar su mirada al frente

- ¿Tiene que ver algo con lo que paso hace unos días? - levante una ceja.

-Parecido, pero antes que me digas algo esto es totalmente seguro y no involucra a extraños- se apresuró a decir.

A partir de ese altercado yo había estado molesta con ella, por cómo había actuado y se había dejado llevar por un don nadie solo para ver a Edward.

Se me hacía egoísta que solo pensara en él y que hiciera una sarta de tonterías solo para verlo.

Suspire, al menos vería a Jacob. Las cosas entre nosotros se podría decir que marchaban bien, me contaba unas cosas que pasaban en la reserva y lo mucho que me extrañaba su papá.

Nos habíamos vuelto más cercanos, compartíamos las noches de insomnio cuando las pesadillas de Bella eran incontrolables.

Le contaba algunas cosas, no quería preocuparlo por su amiga o por mí.

La entrada a la Reserva se hizo presente y con ello los nervios de verlo por fin.

Me limpie las manos en el pantalón secando cualquier indicio de sudor en ellas.

Nos estacionamos, bajando de la camioneta escuche la voz de Jacob -Tea, ¿Dónde has estado loca? - me cargo dándome vuelta en el aire.

Solté una carcajada -Haciéndola de niñera- respondí una vez que me bajo.

-Bella- la saludo de beso en el cachete - ¿Qué hacen aquí? - dio un paso para atrás para vernos.

Bella soltó el aire -Yo te... te traje algo- señalo con su dedo la camioneta detrás nuestra -Es un poco loco- abrió la compuerta.