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Jungsu se despertó porque lo movían de un lado a otro.

—Oye...despiertate. Jungsu...—la voz de su mentor lo sacó de su sueño abriendo uno de sus ojos.

—Hyeong-hyung...¿qué haces aquí?—le preguntó adormilado.

Su cuerpo se sentía completamente recuperado y logró sentarse para mirar con mayor claridad.

—Estoy bien, gracias por preguntar...—le pegó en el hombro haciendo reír al menor.

Hyeongjun era muy cercano a él, no es como que Seungmin no lo fuera solo que este era más...serio.

—Lo siento, solo me sorprendió.

Hyeongjun sonrió con suavidad.

—La lorpori me avisó de que asesinaste a un Nebuhim...—murmuró sentándose a los pies de la cama.

Jungsu se tensó totalmente.

—Nos prometiste no volver a esa universidad...—mencionó y el menor bajó su mirada.

—De verdad lo siento.

—Ellos me dijeron...—los ojos brillantes de Jungsu lo miraban expectantes—que mientras no te acercaras al humano, todo estaba bien.

Jungsu cerró sus ojos con fuerza.

—¿Quién es el humano?—le preguntó con suavidad.

Hyeongjun no quería regañarlo, para eso estaba Seungmin, solo quería entender quién era el Seelirim de su protegido.

—Hueles a café y...perfume suave.

Oh, claro que era el aroma de Gunil.

Cuando el mayor se alejó, Jungsu volvió a respirar.

—Se llama Gunil, Goo Gunil...—murmuró con las mejillas rojas y su mayor se sorprendió al ver ese semblante que nunca había visto en el contrario, aunque no dijo nada y dejó que continuara—es estudiante de música y toca la guitarra de forma genial...es alguien muy brillante...—los ojos del menor brillaron como nunca, se veían llenos de vida.

Hyeongjun lo escuchó atentamente y sin quererlo sonrió con suavidad.

Jungsu le contó todo desde el momento en que se escapó para ir a la fiesta, hasta lo que pasó hace algunas horas atrás.

—Te gusta...—soltó con suavidad y Jungsu levantó su mirada asustado.

Su corazón moribundo latió y el contrario lo notó.

A los vampiros no les ocurrían esas cosas a menos que la emoción sea muy fuerte y...y sea tu Seelirim del que estamos hablando.

Jungsu sabía que debía admitir que lo de Gunil no era por su sangre, era simplemente que se interesaba en él, en su persona.

My sweet vampire | ᵍᵘⁿˢᵘDonde viven las historias. Descúbrelo ahora