La cocina no era algo que a Shoto se le diera bien, de hecho, en los días que había estado allí, Bakugo siempre había cocinado y a él se le daba tan sumamente bien, que apenas le dejaba a él ni hacerse una tostada por miedo a que la liase. Shoto sólo podía sonreír ante ese recuerdo. En el fondo, Bakugo le cuidaba casi como a un niño pequeño en esos temas, era gratificante a la vez que un poco deprimente, porque él quería que dejase de verle como un niño pero a la vez, le encantaba cuando se preocupaba por él.
Hoy, el día de su cumpleaños, quería hacer algo especial y por eso mismo, había pedido paso por paso la receta a la madre de Bakugo. La comida preferida de Bakugo era sin duda alguna el Tantanmen y el arroz al curry, ambas bien picantes. Si algo adoraba Katsuki, era el picante.
Con la carne de res bien picada y la pimienta de sichuan en un bol a su lado, Shoto revisaba la salsa picante y añadía un poco de aceite de chile también a la mezcla. Para él... suficientemente picante, para Bakugo, posiblemente querría un poco más, así que echó otra cucharada.
Una vez todo bien cocinado, metió los fideos en la mezcla para que se terminase de cocinar todo junto. Ahora, sólo le quedaba esperar hasta que Bakugo regresase y sobre todo, rezar para que le gustase pese a su poco don en la cocina.
A las ocho de la tarde, ya tenía toda la mesa puesta, velas encendidas, la tarta guardada en la nevera y el único que faltaba, era Bakugo. Shoto puso los platos calientes encima de la mesa. No podía tardar en llegar. Se sentó delante de su plato y esperó.
A las nueve, seguía sin venir. A las diez, la comida completamente fría seguía allí esperando y Shoto apagó las velas al ver que la cera se derretía demasiado rápido. Esperó y esperó. Miraba el reloj, cambiaba de posición una y otra vez en la silla, miraba cosas en su teléfono y entonces... un mensaje llegó. ¡Él no iba a venir! El mensaje era muy claro.
‒ "Lo siento, Sho, me he encontrado con Tetsu a la vuelta y me entretendré un rato en llegar. No te importa, ¿verdad? ¿Pasamos mañana el día juntos?"
Shoto leyó un par de veces el mensaje. No, no había dudas. Bakugo ni siquiera sabía qué día era hoy o que era importante para él. ¿Habría valido la pena remarcar algo así? Quizá no y por eso mismo, pese al dolor que sintió, lo dejó pasar y tecleó el mensaje.
‒ "De acuerdo. Disfruta."
Fue una respuesta escueta pero ya no tenía nada más que decirle. Estaba claro que Tetsu siempre estaría por delante de él hiciera lo que hiciera. Había intentado ser paciente, enamorar a ese chico poco a poco, hacer que se sintiera bien pero... él nunca sería la prioridad. Ahora lo tenía más claro que nunca y además... mañana tenían la cata de la comida del falso banquete con toda la familia, así que tampoco pasarían el día juntos. Puede que a Bakugo también se le hubiera olvidado eso porque no era importante, porque no iban a casarse, porque él mismo no era importante en ese instante.
Shoto se puso en pie, se dirigió a la percha junto a la puerta y agarró su chaqueta. Necesitaba aire fresco y total, Bakugo posiblemente no volvería en toda la noche y para ser sincero, ahora mismo prefería no tener que verle. Necesitaba pensar con calma y sobre todo... solo.
Se puso la chaqueta y guardó las llaves y el teléfono en uno de los bolsillos antes de salir. ¿Dónde ir? Esa era otra gran incógnita, pero le daba igual en ese momento, solamente, echó a caminar por las calles.
***
Eran las doce menos cuarto cuando finalmente Bakugo recorría las calles de regreso a casa. Fue al dar la esquina, que se encontró a Izuku junto al resto de la pandilla que habían salido a tomar unas cervezas. Él estaba allí haciendo compañía a Iida y a Kirishima que fumaban en la puerta. Izuku siempre había odiado el tabaco, pero no por ello les dejaba ir a solas a la puerta. Parecían estar pasándoselo bien por las risas que llevaban. Posiblemente hablaban de algo gracioso.
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Todo por un "Te quiero" (Bnha, Baku-Shoto)
FanfictionAmbos se dirigían a una boda, Shoto a la de su hermano mayor; Bakugo, a la de su mejor amigo, pero ambos tenían algo en común: sus acompañantes habían fallado y los dos se encontraban en el mismo aeropuerto. Tras recibir Bakugo una trágica noticia...