When we are together | Matty Healy

022 - Somebody Else

Narra Matty:

Casi sin darme cuenta, llegó la hora de ir a buscar a Angy para partir hacia el aeropuerto. Carly vino a recogernos a mi y a Adam al estudio antes de pasar por casa de Amelia. Me pasé todo el trayecto abstraído. No era la primera vez que viajaba a Estados Unidos, pero por algún motivo que no logro alcanzar a entender, me sentía algo inquieto esta vez. Y esa inquietud aumentaba a medida que nos acercábamos a casa de Angy.

— Estás muy callado Matty, ¿estás bien? —la voz de Carly me sacó de mi ensimismamiento.

— ¿Mmmm? ¿Qué? —me limité a fingir que no entendí su pregunta, ya que tampoco tenía una respuesta para ella.

— Parece mentira que no le conozcas, Carly —el tono de Adam era burlón—. Se va a Estados Unidos y va a estar dos semanas a solas con Angy. Está pensando en como hacer para declararse antes de que nosotros le estropeemos esos días en pareja —se giró y me guiñó un ojo, socarrón.

— Te quiero mucho Adam, pero a veces eres imbécil —resoplé entornando los ojos, dejando caer el peso de mi cuerpo sobre el asiento.

— Imbécil eres tú por no ver que te mueres por ella y ella por ti casi desde el momento en que os conocisteis. Y no hacéis nada más que postergar lo inevitable —negó con la cabeza.

— Ya vale Adam. Si dicen que solo son amigos, es que solo son amigos —le regañó Carly, aunque con la voz dulce que tanto la caracterizaba—. Además, después de todo lo que ha pasado esa pobre chica, seguramente lo último en lo que piensa ahora mismo es en empezar una relación con alguien. Sea con Matty o con cualquier otro.

— ¡Exacto, gracias Carly! —alcé los brazos y la vista al cielo—. Ella tiene mejores cosas que hacer, como por ejemplo terminar ese CD con nosotros y olvidarse de la mierda de sus padres. Así que bueno, no voy a negar que una de las mujeres más bonitas que han pasado por mi casa. Que tal vez quise y estuve tentado de acostarme con ella.

— ¡Lo ves! —bufó Adam.

— He dicho quise, no te emociones. Pero ahora no es el jodido momento, Adam. Hay más cosas en la vida que acostarme con ella o pensar si quiera en el amor ¿sabes?

— Pero... —intentó replicarme.

— Pero nada, Adam. Solo quiero ir a Estados Unidos y hacer el mejor disco que hayamos hecho desde que empezamos nuestra carrera. Junto con Angy en estos primeros días y junto a vosotros cuando lleguéis. Además de después centrarnos en la gira. Nada más, y punto.

— Lo que tú digas —resopló Adam volviendo a mirar al frente mientras Carly reía mientras conducía.

— No sé cómo le aguantas, es muy intensito. Aún estás a tiempo de cambiarle —reí dirigiéndome a Carly— ¿Tal vez por alguien como yo? Soy menos serio y más divertido —le guiñé el ojo a través del retrovisor interior.

— ¡Oye, no fastidies! —gruñó Adam mirándome con el ceño fruncido.

— Entonces tú tampoco me fastidies —le miré apretando los labios y mirándole de forma acusatoria.

— Vale, vale. No volveré a decir nada respecto a Angy,  ¡pero deja de ligar con Carly! 

— Me parece justo —reí acomodándome de nuevo en el asiento.

— Sois como dos niños pequeños —negó Carly con la cabeza intentando contener una carcajada.

Después de esa pequeña charla, no tuvimos casi tiempo de hablar de muchas cosas más, en pocos minutos ya llegamos frente a la casa de Amelia, donde Angy ya nos esperaba junto a una enorme maleta y su guitarra.