Narra Matty:
La mañana siguiente después de la discusión con Angy y ese... glorioso y erróneo beso me levanté temprano. En realidad apenas conseguí dormir pensando en Angy llorando por mi culpa y en sus labios aferrados a los míos. Podrían convertirse en una adicción para mi, pero no podía permitírmelo.
Al menos no ahora hasta que Angy estuviera mejor y nosotros termináramos con la gira. Tenía demasiada presión encima con todo lo del álbum, las promociones y la gira. Aunque sabía que Angy y los demás tenían razón en cuanto a las drogas, por ahora era lo único que me ayudaba a sobrellevar un poco toda la fama que se nos estaba viniendo encima. Cuando me acostumbrara a ello, lo dejaría. Estaba todo controlado.
¿Sí? ¿Estás seguro?
Salí temprano de la habitación, encontrándome con Adam y Carly. Salí corriendo con la excusa de que teníamos mucho trabajo por delante y quería llegar pronto al estudio. Mentí. Era un maldito cobarde y solo estaba huyendo para postergar lo máximo posible mi charla con Angy. Aunque siempre trataba ayudar a los demás con sus problemas personales, la verdad es que a mi me costaba horrores enfrentarme a los míos, o hablar de ellos con alguien. Por eso huía esa mañana de Angy como un gallina.
Y como el idiota que soy, me escondí todo el día tras esa excusa de que teníamos mucha trabajo y quería estar concentrado para evitar a Angy. Aunque me moría por abrazarla, por sentirla cerca, por bromear como siempre con ella, sabía que las cosas hoy estarían... raras entre nosotros.
Tras la comida decidimos hacer un pequeño descanso antes de seguir con las grabaciones de la tarde. El estrés y el agobio comenzó a apoderarse de mi de nuevo, por lo que decidí salir al patio interior que había en el edificio para fumarme un cigarro e intentar poner mis ideas en orden. O al menos en el mejor orden dentro de mis posibilidades. No llevaría mucho tiempo a solas cuando escuché unos pasos acercarse.
— ¿Vas a seguir ignorándome todo el día, Matthew? —mi cuerpo se tensionó instintivamente al escuchar la voz de Angy muy cerca de mi.
— Sabes que no me gusta que me llames Matthew —exhalé una bocanada de humo, fingiendo como que no había escuchado esa pregunta.
— Y a mi no me gusta que me ignores. Así que estamos en paz supongo —me quitó el cigarro de mala gana y le dio una intensa calada. Vale, mala señal, creo que la había cabreado.
— No te he estado ignorando —recuperé mi cigarro—. Son muchas cosas las que tenemos que hacer y quiero estar centrado, nada más —añadí sin mirarla. La conocía y sabía porqué estaba aquí.
— ¿Podemos hablar? —preguntó directa. Y ahí estaba la pregunta que llevaba todo el día evitando.
— No hace falta hablar de nada, ojos lindos —intenté responder con calma, rezando porqué me hiciera caso a la primera.
— ¿De verdad vamos a hacer como si nada? ¿Cómo si ayer no hubiera pasado?
—Las cosas están bien así, tal y como estaban hasta ahora —intenté mantener la calma. Sabía que no podíamos hacer como si nada, pero yo ahora mismo no estaba preparado para tener esta conversación.
— Si, bueno. Yo también lo creo, pero insisto en que creo que deberíamos hablar. De todo. De lo que pasó entre nosotros, de lo que había sobre...
— Angy, de verdad, no es necesario —la corté de nuevo—. Creo que los dos sabemos perfectamente en que punto estamos a nivel personal, no necesito ni quiero hablar del tema. Todo está bien, olvídalo —desvié la mirada y tiré la colilla al suelo para apagarla.
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When we are together | Matty Healy
FanfictionAngela, nacida y criada en el seno de una familia adinerada de Inglaterra; busca una vía de escape a esa vida estricta que conlleva ser de linaje noble inglés. Esa escapatoria llega en forma de cantar un pubs a lo largo de Mánchester y componer su p...