DEAL 💋 || Taegyu [AU]

⁴³ᜊ⇢ Farewell

//Beomgyu// [Viernes - 15:38]

—Ya, ya...— Hyung dejó pequeñas palmaditas en mi espalda como consuelo ante mi llanto.

Era difícil controlar mis sentimientos. Me sentía horrible de tan sólo pensar en la situación en la que había puesto a todos, en la pesadez del ambiente que nos envolvía a causa de mis errores.

Soobin hyung había estado acompañándome en las últimas horas en el hospital, a la espera de nuevas noticias. No quería ni imaginar lo que estaría pasando Yeonjun dentro de aquella habitación, y mucho menos lo que estaría pensando el señor Kang de mí.

—No fue tu culpa, Beomie... Tranquilo.— Habló el azabache en mi dirección, incapaz de detener el flujo de mis lágrimas.

—Eso no interesa... S..Sin importar las veces que se lo explique, el señor Kang no va a creerme...— Sollocé en el peor de los pensamientos.

—¿Por qué crees eso? Él te conoce, Beom... Dile lo que pasó y verás que él te entenderá.— Respondió en seguida, haciendo su mayor esfuerzo por calmar mi mente pesimista.

—Me vio empujar a Yeonjun con sus propios ojos, ¿c..cómo se supone que me entienda? ¡De seguro ese idiota ya le llenó la cabeza de tonterías para ponerlo en mi contra!— Reproché una vez más, creyendo firmemente en la habilidad del rubio para salirse con la suya.

Hyung se mantuvo callado ante mi llanto, resignado a la búsqueda en vano de una solución.

Intenté limpiar mis lágrimas con la manga de mi suéter, aunque estas siguieran cayendo desesperadamente. No estaba listo para verlo a los ojos otra vez... No estaba listo para aceptar que nuestra relación volvía a arruinarse de nuevo, no quería sentir su distancia una vez más, detestaba que el destino continuara poniéndonos obstáculos en el camino. Sus últimas palabras me habían hecho creer que las cosas por fin empezaban a salir bien...

"Te amo"

Pero claro, tenía que llegar Yeonjun a hacerme la vida imposible otra vez, a manipular su corazón como si nada y arrebatármelo de las manos.

—¡Taehyun! ¿Cómo está él?— Se levantó a preguntar el azabache en cuanto el nombrado dejó la habitación de la "víctima".

—Mejor. La doctora dice que necesita quedarse a control por unos días, así que me quedaré a acompañarlo.— Lo oí pronunciar con seriedad, para luego dirigir su mirada hasta mí.

Me levanté de mi asiento cabizbajo, haciendo mi mayor esfuerzo por dejar de llorar. Me sentí avergonzado frente a sus ojos que de seguro estaban juzgándome sin piedad.

—¿Podrías dejarnos un momento a solas?— Habló en seguida en dirección al azabache, haciéndome temblar de los nervios.

Soobin asintió al instante y desapareció entre los largos pasillos del hospital, dejándome un desmedido temor en el pecho.

No quería que volviésemos a pelear... Odiaba que me dirigiera su voz alzada y esa mirada furiosa que me hacía sentir como el ser más repugnante del universo. Odiaba tener que gritarle y hablarle de mala manera, odiaba que fingiéramos no conocernos en cada respuesta grosera.

Me apresuré a realizar una reverencia antes de que sus comisuras pudieran siquiera abrirse para decir algo que rompiera más mi corazón.

—L..Lo lamento...— Pronuncié en un sollozo, dejando que mis lágrimas fluyeran otra vez.

Sentí sus ojos sobre mí. Podía imaginar su odio escalofriante aunque sus orbes tan sólo se encontraran sorprendidos por mi repentino acto de respeto.