DEAL 💋 || Taegyu [AU]

²⁶ᜊ⇢ Traitor

[16:04]

—Avísame cuando llegues a casa.— Entoné en dirección a Kai, antes de que diera un paso más allá de la puerta.

—Bien.— Apenas avanzó cuando se dio la vuelta para decir algo más. —Y oye, en serio no estoy interesado en él. Puedes bajar la guardia, amo a mi novio.— Aclaró por centésima vez en el día, luego de que su cuello casi fuera estrujado por mis manos.

—Más te vale.— Reproché, cerrando la puerta.

Mi cabeza iba a explotar. Había sido el día más incómodo y molesto de mi vida. Kai y Beomgyu se la habían pasado hablando toda la tarde, riéndose como hienas atragantadas y compartiéndose secretitos entre miradas. Solía creer que el hecho de que el menor se agregara a nuestro grupo de amigos podría ser buena idea, pero se había sentido como lo peor. Me habían excluído por completo, apenas entendía de lo que hablaban en sus estúpidos códigos y Beomgyu no me había dirigido la mirada en todo el día.

—Señor Kang, ¿quiere que lo ayude a limpiar?— Vaya, por fin se dignaba a hablarme.

—No, está bien.— Hice un esfuerzo por contestarle de buena manera.

Me senté a su lado en el sofá. El que estuviera enfadado con él no significaba que mi corazón pudiera alejarse de su persona. Sin importar cuán molesto estuviera, mi anatomía necesitaba de su cercanía.

Me mantuve esperanzado ante alguna nueva interacción entre nosotros... Fui un iluso al pensar que una vez que Kai se marchara su atención volvería a centrarse en mí.

—Señor Kang...— Lo observé. —¿Puedo hacerle una pregunta?— Sus orbes se fijaron en mi rostro.

—Dime.— Mi corazón se calmó un poco al finalmente interactuar con él.

—Usted... ¿sabe cuál es el número de Kai?— Entonces exploté.

Mi presión arterial enloqueció al oírlo pronunciar ese nombre otra vez. Estaba obsesionado con él, no había parado de parlotear en toda la tarde y ¡¿ahora venía a preguntarme sobre su contacto?! Iba a volverme loco.

—¿Para qué lo quieres?— Su cuerpo tembló ante mi forma rabiosa de contestarle.

—Ah... e..es que hyung dijo...

—¿Hyung?— Quise arrancarme los oídos.

Desvié mi mirada. No aguantaría un segundo más observando sus ojos traicioneros. Solté un suspiro intentando calmarme, no quería empeorar las cosas, no quería gritarle todo lo negativo que estaba sintiendo en ese preciso momento.

—S..Señor Kang...

—¡¿Por qué sigues llamándome así?!— El menor dio un salto. —Te diriges a él como si fueran amigos desde hace cinco años, ¡¿por qué conmigo es diferente?!— Mi paciencia se había agotado.

Parecía que lo hacía a propósito. Provocaba mi furia con cada una de sus palabras, como si estuviese planeando sacarme de mis casillas.

Sus orbes me apuntaron con temor, casi cristalizados del susto.

—Y..Yo... sólo creí que Kai podría...

—¡Deja de hablar de él!— Alcé mi voz. —¡No se alejaron en todo el maldito día! ¡¿Desde cuándo tienen secretos entre ustedes?! Hablaban entre códigos para que yo no los entendiera, ¡¿qué carajos decían que yo no podía saber?!— Agregué con un nudo en la garganta.

Odiaba gritarle. Odiaba encoger su corazón, odiaba provocar ese brillo de angustia en sus ojos... pero también odiaba que mi vida amorosa fuera tan desgraciada.