Fuutarou ½

Capítulo 15: Itsuki y Nino, par de chismosas

Capítulo 15:  Itsuki y Nino, par de chismosas.

Fuutarou se quedó sentado en la banca del parque, meditando sobre todo lo que Ranko le había dicho admirando una vacía cartera por tener que pagar la comida. Las palabras de Fumiko resonaban en su mente, tratando de encontrarle sentido a la situación, suspiraba derrotado y con cansancio.

—¿Qué haces aquí? —preguntó una voz femenina, sacándolo de sus pensamientos.

Fuutarou levantó la mirada y se encontró con la mayor de las Nakano, Ichika; que lo observaba con una mezcla de curiosidad y preocupación.

—Solo... pensando en algunas cosas —respondió Fuutarou, intentando sonreír, pero la preocupación seguía evidente en su rostro, y asi Ichika se sentó a su lado, mirando el cielo del atardecer, recargando su hombro en el del chico.

— ¿Te preocupa algo? Puedes hablar conmigo si quieres —dijo ella con una voz suave, intentando consolarlo y ganarse su confianza.

Fuutarou suspiró, indeciso sobre si compartir sus preocupaciones con ella. Finalmente, decidió que necesitaba desahogarse, aunque claramente no le diría la verdad porque si no nos quedamos sin historia.

—Conocí a alguien que tiene una cualidad muy similar a la mía —empezó, notando la mirada atenta de Ichika quien frunció el ceño, tratando de comprender lo que Fuutarou le estaba contando.

— ¿Qué clase de cualidad? — pregunto intrigada la chica, Fuutarou solo suspiro sin saber qué responder — ¿Qué te dijo exactamente? —preguntó otra vez si estaba interesada en ayudarlo.

—Hay varias cosas, una pequeña discapacidad mental, si se podría decir —explicó Fuutarou, con un tono de frustración en su voz.

—Debe ser difícil para ti —dijo suavemente parecía comprenderlo aunque en su cabeza solo pase el video del pedazo de pan que cae —. Pero no tienes que enfrentarlo solo. Estamos aquí para ayudarte en tu discapacidad.

Fuutarou se sintió extraño por sus palabras ya que las sintió más que nada vacías, pero todavía tenía muchas dudas en su mente, ya que no podía contar lo de Fumiko por todo el lío de la chismosa de Nino.

—Gracias, Ichika. Solo... no sé cómo aceptar algo así. No quiero vivir con esta discapacidad mental para siempre —confesó, dejando ver otra mentira más al catalogó, Ichika sonrió y le dio una palmadita en el hombro.

—Tómate tu tiempo para pensar en ello. A veces, las respuestas no son inmediatas, pero estoy segura de que encontrarás una forma de manejar esto —le aseguró "Aunque no se que enfermedad tienes" medito Ichika dentro de sí misma.

Fuutarou asintió, dándole las gracias a sus palabras. Justo en ese momento, su teléfono sonó, sacándolo de la conversación. Miró la pantalla y vio que era Itsuki.

—Es Itsuki. Probablemente me esté buscando —dijo, levantándose de la banca—. Gracias por escucharme, Ichika.

—Siempre estoy aquí para ti, Fuutarou —respondió ella, levantándose también—. Vamos, no querrás hacer esperar a Itsuki.

Los dos caminaron juntos de regreso al departamento de las quintillizas, con Fuutarou sintiéndose un poco más ligero después de hablar con Ichika pese a no decirle en realidad nada sabía que ella lo ayudaría en lo que pudiera. Aunque todavía tenía muchas dudas y preocupaciones, sabía que podía contar con ellas para apoyarlo en este difícil camino, aunque será más una carga que una ayuda.

Al llegar al departamento, encontraron a las otras hermanas esperándolos en la sala.

— ¿Dónde estabas, Fuutarou? —preguntó Itsuki, con un tono de preocupación en su voz.