LAS APARIENCIAS ENGAÑAN

19. TE AMO ERICK.

Cantares 6
5 Aparta tus ojos de delante de mí,
Porque ellos me vencieron.
Tu cabello es como manada de cabras
Que se recuestan en las laderas de Galaad.

Narra Fabricio:

Días después.

La vida no puede ser mejor para mí de lo que es ahora.

Creo que Dios me ha recompensado por quitarme de encima a esa Elisa.

Después que la denuncie con sus padres, nunca más volví a saber de ella.

Ahora el que está un poco apartado de mi es Erick, pero ya se le pasará, no creo que esté enojado conmigo toda la vida.

Hoy me encuentro en un lugar bastante especial, me han invitado a la alfombra roja para dar entrega a los premios nobel.

Estoy más que seguro que yo soy uno de los ganadores.

«Eso ya es algo de esperarse».

Me rasco disimuladamente el cuello.

—quedate quieto —me dice Jason entre dientes.

A él también lo invitaron a la alfombra roja.

Eso ya era de esperarse, considerando que es mi amigo.

—¿Que quieres que haga? —me quejo sin dejar de sonreír —ese corbatín me pica mucho.

Ojalá uno pudiera venir de cualquier forma vestido, pero como es un evento de etiqueta hay que venir trajeado.

—pues aguanta —contesta —hay muchos camarógrafos por ahí y puedes quedar mal en una toma.

«Eso es cierto».

Hago mi mayor esfuerzo por quedarme quieto y sonrío a las cámaras.

No sé cómo hacen esas cámaras para soportar tanta belleza.

Una mujer extremadamente hermosa toma el micrófono y todos estamos atentos a sus palabras.

Lleva un vestido rojo que le queda hermoso, tiene un escote hasta su espalda baja y una leve abertura que deja apreciar toda su pierna.

—y el mejor premio al mejor actor en dramas, películas etcétera es...—nos mira a todos.

Todos aplaudimos atentos a sus palabras.

—es para el joven Méndez, el chico J3 que se ha robado todos nuestros corazones en la actuación —termina de decir.

«Lo sabía».

Me pongo de pie en medio de los aplausos y fotografías, subo al escenario en donde me espera mi trofeo.

De verdad que ha valido la pena tanto esfuerzo.

Lo recibo dándole un beso en la mejilla a la chica mientras sonrió a las cámaras dejando ver mi premio al mejor actor de Hollywood.

Después de eso repartieron más premios, incluso le dieron a Jason uno por mejor actor de música urbana, pero eso no importa.

Aquí el único importante soy yo y nada más.

Después de salir de aquel gran evento, afuera me estaba esperando una cantidad de periodistas.

—¡Joven Méndez, joven Méndez! —dicen apenas me ven —concedanos el honor de hacerle algunas preguntas.

Yo asiento quitándome los lentes de sol.

—que sean pocas por favor.

—¿Que piensa hacer de ahora en adelante? —pregunta un joven.

—seguir actuando —respondo lo obvio.