JUNTOS OTRA VEZ

17 3 2
                                    

Capítulo 12:

Una Bulma ya más calmada comenzó a hablar, comenzó contándole que en realidad el pañuelo que él le había regalado se perdió, no quedó nada de él por culpa de aquellos malditos androides...

Bulma: el que me has visto fue el que tu otro yo me envío desde la otra línea temporal, estoy segura que Trunks ya te contó todo eso (Vegeta asintió, Bulma lo había escuchado y ahora él haría lo mismo), pero lo que no te habrá contado es que cuando me envió un segundo pañuelo... incluyó una carta...
Vegeta (interrumpiéndola en ese instante): una carta?, te escribió una carta... uhmmm... la verdad es que es algo que yo hubiera hecho en su misma situación
Bulma (lo miro sorprendida): uhmmm... sí lo hizo, lo que no... esperaba es que no sólo hayas dicho que lo hubieras hecho, sino... que me has dicho... has pronunciado palabras... muy parecidas a las que uso... al hablar de sus sentimientos

En ese instante Vegeta no respondió nada, hasta a él mismo le sorprendió mucho más saber que realmente eran incluso más iguales de lo que él mismo pensaba, así que la esperanza que tenía en ese instante sobre algo que quería llevar a cabo aún era mayor, si él lo consiguió en la otra línea temporal... él también lo conseguiría, aunque ella nunca había querido... hacerlo con... ese maldito insecto.

Mientras los pensamientos de Vegeta fluían en su cabeza a mil por hora, Bulma continuó hablando al ver que él no lo hacía...

Bulma: pero hay algo que en esa carta me dijo que yo... ya había descubierto mucho antes, me decía que había guardado aquellos guantes que le regalé, que estaban escondidos en la antigua habitación que ocupaba porque era muy importante para él, y yo... los tengo guardados desde que los encontré antes de mandar a nuestro hijo a que les avisara a todos que los androides aparecerían, que... Goku... (derramó una lágrima al recordarlo) moriría de una enfermedad, que tú...(calló en ese instante)

Después de unos segundos ambos callados...

Vegeta: aún recuerdo el día que me diste aquellos guantes...

(Recordando en voz alta...)

Aquel día había estado entrenando desde primera hora del día como siempre, pero me tomé un descanso y me dirigí a la cocina, cogí una bebida y salí al jardín, no sé por qué comencé a andar hacía el laboratorio pero me detuve frente al templete que había en el jardín cuando te vi venir hacía mí, estabas tan hermosa, llevabas ropa de trabajo bajo tu bata de laboratorio y el cabello algo despeinado, pero para mí estabas tan preciosa como siempre, en tus manos llevabas aquella caja azul alargada, me hiciste una señal para que entrara en templete y allí...me la diste, uhmmm... recuerdo su olor, olía fresas igual que tú, cuando la abrí y vi aquellos guantes... mi corazón dejó de latir por un instante, el aire me faltó por un momento al embargarme una emoción que entonces no sabía describir, te obedecí cuando me dijiste que me los probara, eran suaves y cálidos, me venían perfectos, eran... perfectos, por eso no iba a dejar que me los quitaras si no aceptaba que tuviéramos aquella cita y no me he arrepentido jamás de decirte que sí, fue maravillosa, tanto como los guantes, no podía dejar que se estropearan, nunca he recibido un regalo de alguien... por quien mi corazón sería capaz de detenerse como acababa de ocurrir. Y por esa razón los llevé a mi habitación, quería seguir observandolos, sintiendo su tacto, y en ese momento vi algo que se me quedó grabado en mi mente como si realmente lo hubieras bordado ahí, DE BULMA PARA VEGETA, con aquellos preciosas letras azules, con más motivo debía guardarlos en ese instante.. si mi corazón dudaba... dejó de hacerlo, te amaba absoluta e irremediablemente...

Cuando Bulma se dio cuenta de que Vegeta no sólo no iba a hablar más sino que su cara mostraba esa sonrisa que tanto le gustaba a ella... no pudo más que lanzarse a sus brazos, para ella el príncipe acababa de hacerle una declaración de amor, algo... que nunca pensó de fuera capaz antes de... morir, algo que... el de la otra línea temporal tan solo se atrevió en carta, pero ahora... se lo había dicho..., palabras salidas de sus propios labios y mirándola a los ojos sin... desviar ni un sólo instante su mirada...

Aunque antes de lanzarse devorar sus labios... llegó a su mente algo que debía decirle...

Bulma (abrazada a él): perdóname mi amor
Vegeta (con cara de asombro de no entender por qué le pedía perdón): perdón?, porqué Bulma?, qué tendría que perdonarte yo a ti, el único que necesita perdón soy yo... el tuyo...
Bulma: yo te perdoné hace mucho tiempo de todas aquellas cosas, antes de que... murieras, pero... yo he hecho algo... perdóname mi amor, fue mucho antes de saber que estabas aquí esperándome, antes de que nuestro hijo te trajera de vuelta, fue cuando...
Vegeta (la interrumpió): shhh (poniendo un dedo sobre los labios de ella), lo sé, Trunks me lo contó, y Bulma, si yo hubiera tenido la misma oportunidad que tú... también la hubiera besado, eso es algo que no necesito perdonarte, porqué... no fue nada malo y... ahora estoy aquí, y jamás voy a dejar de besarte, de amarte...

Antes de que pudiera decir más, Bulma lo calló arrebatandole un beso, ella había sentido la necesidad de no ocultar nada pero por lo visto su hijo también le había contado lo ocurrido en Navidad.

Al sentir de nuevo un beso de su Bulma, la abrazó aún más contra su pecho, cerró los ojos y dejó que fuera ella quien marcara el ritmo, del beso y... de lo que ella quiso después, dejó su cuerpo relajado para que fuera ella quien lo dejara caer hacia atrás y comenzara esa dulce danza de besos y caricias sobre su piel una vez más hasta que sus cuerpos agotados no pudieron más.

Esta vez fue Vegeta quien despertó primero, estuvo observandola y acariciando su cabello azul suavemente con las yemas de los dedos intentando no despertarla, estaba aún más hermosa que en los recuerdos que lo habían estado asaltando cada noche desde que volvió a la vida, estaba tan ensimismado en sus pensamientos que no se percató cuando ella comenzó a abrir los ojos hasta que notó un suave beso en su pecho desnudo.

Bulma: uhmmm.... me quedaría así para siempre (decía abrazándose a él con más fuerza)
Vegeta: yo también, pero creo... que es hora de que volvamos, me gustaría ver a nuestros hijos y a nuestra nieta, y por lo que me dijo Trunks, su hermano va a tener un hijo pronto, me gustaría conocerlo
Bulma: niña
Vegeta: uhmmm... que!
Bulma: Trunkss tendrá una niña con Maii, le falta muy poco para tenerla
Vegeta: oh!, ya veo, otra nieta, eso es fabuloso, estoy seguro de que se parecerá a ti, Bra tiene tus ojos, los mismos que Trunks, que ambos Trunks, pero antes de que nos vayamos hay algo... que quiero hacer antes...
Bulma (mirandolo sorprendida al alzar su cara para mirarle mejor a la cara): el qué?
Vegeta: ya lo verás, vístete, te espero junto a nuestro árbol

Después de decir esas palabras, se levantó, le dio un beso los labios y se dispuso a vestirse, marchándose antes de que ni tan siquiera Bulma pudiera pronunciar una palabra.

Bulma (pensando para así después de verlo desaparecer por la puerta): qué habrá ha querido decir, que... querrá hacer?

Después de unos segundos... reaccionó, se vistió y... salió tras él...

Continuará...

Escrito por Mer Lois

JUNTOS OTRA VEZDonde viven las historias. Descúbrelo ahora