1.Black Widow

Arco, flechas y más muerte

Volví al trabajo según lo dijo Stene; a los dos días.

Tengo trabajo retrasado, pero de mi cabeza no sale la idea de que Natalie me puede ayudar a recuperar la información que robé.
Después del medio día terminé mis deberes y la busqué.

Normalmente se encuentra en el laboratorio así que me dirijo hacia allá. Para mi sorpresa no lo esta.

-¿La has visto?-le pregunto al otro cerebrito; Ben.
-Hace un momento se fue-responde-¿qué pasa?-
-Avísame si vuelve-omito su pregunta.

Indignada bajo al sótano; es el único lugar donde puedo pensar.

<<Bueno también fue el único lugar donde desmantelé a la verdadera Dottie y capturé a Dan; es genial el sótano>>

En las escaleras que bajan hasta el sótano encuentro a Natalie, ojalá me la hubiera encontrado a ella sola; pero ¡no!. Chris y Natalie se besan en un extremo. Entro en shock por unos segundos y grito:
-¡¿Qué hacen?!-
-¿Qué no es obvio?-responde Chris.
Natalie lo acaricia sin mirarme.

<<La humanidad va cada vez peor>>

-¿Cómo es posible?, me suspendieron de trabajar por defenderte de él, ¿ahora lo besas?-les digo a los dos.
-Los opuestos se atraen; un ejemplo es el magnetismo-menciona Natalie.
-¡Me vale una...el magnetismo!-chillo manoteando en el aire-a mi no me hables así-
Chris toma la mano de Natalie y los dos se van dejándome sola.

<<En mi vida, nunca seré así>>

Ahora no cuento con la ayuda de Natalie pero tengo un Plan B.

Subo por el ascensor de nuevo a los laboratorios. Busco a Ben y le pregunto:
-¿Me ayudas en algo?, pero tiene que ser secreto-
-Depende-contesta tocando sus gafas.
Pellizco su bata y lo adentro en un cuarto vacío; cierro la puerta.
-¿Era una escusa para besarme sin que mis colegas se dieran cuenta?-alardea.
-No; es una para matarte sin que se dieran cuenta-bromeo.
-Muy graciosa ¿qué toca hacer?-pregunta Ben.
-Sencillo.Quiero que obtengas la información de éste CD-le digo  al oído y se lo doy.
-Está mojado-comenta tocándolo.
-Si lo sé, por eso necesito tu ayuda-respondo murmurando.
-Okey, lo haré. ¿Qué me das a cambio?-pregunta.

<<Esto no es bueno>>

-¿Qué quieres?-le pregunto agobiada.
-Una cita-añade con una sonrisa.
Miro a Ben de los pies a la cabeza.
-Si no hay de otra-me doy por vencida.
Feliz, sale del cuarto.

<< ¿Porqué una cita?, ¿porqué los hombres me piden citas?>>

De camino a casa recibo una llamada. Es Ben.

<<Donde consiguió mi número>>

Finjo que no la vi.
Pasan dos minutos y llega un mensaje de texto. Otra vez de él.
  *Mensaje de Ben*
Hola Natasha. La información que se encontraba en tu CD la pasé a una USB. Todo se rescató. Ni Siquiera la vi porque pensé que no te gustaría.
Te espero en Brack's (restaurante) a las diez.
Hasta entonces.
*Fin mensaje*

En mi armario busco un vestido elegante, me lo coloco y camino hasta Brack's porque queda relativamente cerca.
Ben ya está sentado alado de una ventana, lo distinguí por sus enormes gafas de cerebrito y su corbatín que acentúa  el conjunto erudito.
Me siento junto a él.

-Hola-saluda cortésmente.
-Hola-contesto vacilante.
Pide la carta. Ordenamos nuestra comida; Ben comerá pasta y yo filete.
Mientras esperamos la comida él comienza la plática.
-¿Para que la información?-me interroga.
-Cosas del trabajo-miento.
-Sea lo que sea, aquí está-dice y me pasa un sobre.
Lo abro y efectivamente, el CD y la USB.
-Gracias-le digo carismática.
-De nada-contesta-fue fácil-

Llega la comida.

Terminamos de comer. Ben paga la cuenta y los dos salimos de Brack's.

-¿Te llevo?-se ofrece abriendo la puerta de su Audi que aparca al frente.

<<Hay tres cosas que las mujeres amamos de un hombre; su carisma, su elegancia y que nos transporten en autos costosos>>

-Claro que si-contesto.

En el auto coloca música que a mi parecer, es extraña. Señalé la ruta todo el camino y Ben me obedecía.
Paramos en un semáforo. Ya era noche, así que el silenció abarca las calles de Londres.
En frente de nosotros pasa un señor cualquiera, pero de repente se detiene en la mitad de la vía y saca un arco.

-¡Arranca!-grito lo primero que se me viene a la cabeza.

No llevo un arma con que defenderme.

Ben pisa el acelerador y por poco lo atropellamos.
No vi que se hiciera alado. ¿Donde estará?.
Ben conduce rápido y yo miro hacia todos los ángulos.

-¿Quién es?-me pregunta Ben.
-No lo sé-vuelvo a mentir. Últimamente lo hago a menudo.
-¡No te creo!, ¡dime de una vez quien es!-grita.
-¡No lo sé!-grito con él.
Hace una mueca de desaprobación.
-Nos va a atacar, ¿tienes alguna arma de casualidad?-pregunto apurada.
-Si, en la guantera-añade conduciendo todavía más rápido. Busco el arma entre la biblioteca portátil que tiene en su auto. Cuando al fin la encuentro, es tan solo una pistola con dos balas.

-¿Solo dos balas?-digo enfadada.
-Soy científico, no asesino Natasha-chilla.
Creo que por la presión, sus gafas se empañaron.

<<No te rías, es un momento serio Natasha>>

Siento  pasos en el techo. Miro a Ben, por su cara sé que también los sintió. Para el auto y esperamos unos segundos en silencio.
El hombre del arco se asoma por la ventana de adelante; casi como película de terror.

<<¿Cómo estuvo en el techo todo este tiempo?>>

Disparo a su rostro y fallo.
Sube de nuevo al techo y lanza flechas hacia nosotros. Me cubro con mi bolso de cuero.
Siento que baja  y con pistola arriba salgo del auto. Ya no está.

-Ben podemos correr, ¡vamos!-le grito.
Volteo a verlo. Tiene una flecha clavada en su cráneo.
Cierro la puerta del Audi con Ben adentro y me despido por última vez.

<<Este chico y su maldito arco me tienen cansada>>

Camino despacio en la acera. Pienso en Ben, pero pensar en él me recuerda a Roll. ¡Ojalá le hubiera aceptado ese beso!. Si tuviera de nuevo a Roll en mi departamento, llegaría y lo abrazaría tan fuerte, que nunca en mi vida lo soltaría. Comienzo a amarlo, pero sé que sólo amo a un recuerdo; lo que en este momento es, un simple recuerdo.
Llego a un parque desolado. Es el mismo parque al que llegué por primera vez con las chicas y Dottie. Dottie, la anciana Dottie.
Una flecha pasa el frente de mi, casi rozándome la nariz. Veo de que dirección vino y allí esta, el chico del arco.

<<Te mataré>>

-¿Qué quiere?-digo ganando tiempo para sacar mi pistola, bueno en realidad la de Ben.
-No te dolerá-me dice el muy tarado.
Saco la pistola y disparo. Detiene la bala con el filo de su arco.

<<Eso no pudo ser posible>>

Me clava un dardo tranquilizante.
Caigo en cuestión de segundos.

Despierto en un calabozo. Hay una sombra que me resulta familiar...
-Al fin despertó, señorita-se burla el chico del arco.

<<¿Esto va enserio?>>

-¿Qué me va a hacer?-pregunto resignada.
-Yo nada, lo harán otros; aunque no te dolerá si colaboras-contesta él.
-¿Quién es usted?-vuelvo a preguntar.
-Unos me llaman Ojo de Halcón, otros Hawkeye; pero para ti soy Clint Barton-contesta Clint.