1.Black Widow

Vidas pasadas

-Lo entiendo-dice soltándome.
-Lo sé-chillo.
-Ven-murmura y me dirige al ventanal que se encuentra en la sala.

Clint me abraza tomándome de la cadera; ya sé a donde va esto. ¿Acaso los hombres no tienen otros trucos para impresionar a las mujeres?.
Roll hizo lo mismo y ahora Clint; me siento realizada.

La ubicación de este hotel es genial, desde aquí, podemos ver el Empire State.
Clint señala un edificio y dice:
-Allí vamos a vivir-
A mi parecer, son los pent house más caros que he observado en toda mi vida, si no tuvo dinero para pagar el hotel debido a que pagó la comida, ¿porqué si tendría para pagar un pent house?.
-Estas demente-le suelto
-¿Quién dijo que no lo estaba?-dice.

Por un momento lo miro como si no lo conociera.

-Sigues conociéndome Romanov-añade como si me hubiera leído la mente.
-Obviamente Barton, o debo decir Ojo de halcón-contraataco.
Toma dos cervezas y me pasa una.
-¿Dónde aprendiste todo lo que sabes?-pregunto.
-¿A qué te refieres?-dice sorprendido.
-¿En dónde aprendiste a manejar el arco?-digo y siento que es una punzaba en su corazón, por la cara que está haciendo.
-Muchos lo preguntan, pocos obtienen la respuesta-dice dándole un trago a la botella.
-¿Pocos?-añado riendo.
-Si pocos-contesta Clint.
-¿Quiénes?-menciono mirando el horizonte.
-He tenido planeado decírselo a tres personas-contesta-tu sabes, cuestiones de seguridad-
-A..-murmuro.
-Eres la primera-me dice.
Cual niña inmadura le saco la lengua.
-Todo empezó cuando..-comienza a contar pero lo interrumpo.
-Al grano Barton-espeto.
-¿Quieres saber o no?-me dice riendo.
-Adelante-digo.
-Okey. Todo comenzó cuando era un simple niño, mis padres nacieron en Estados Unidos, al igual que yo, mi madre fue una gran mujer en comparación con mi padre, en un acto de amor llegue yo, con tan solo diez años fuimos de paseo a la Unión, en aquel entonces las tensiones  todavía no habían sido desmanteladas. Nos encontrábamos en Moscú, los tres caminábamos por la plaza roja, de un momento a otro calló una bomba, esta los mató, mire un pedazo de metal que provenía del artefacto; "Industrias Stark". Eso comenzó las tensiones entre los dos países, luego se unió Inglaterra.
Herido, logre correr lo más que pude, llegué hasta un circo local y me refugié en el, fue fácil ingresar, ya que provenían igualmente de Los Estados Unidos. Les conté mis historia y me aceptaron con facilidad, pasé años practicando tiro con Jacques Duquesne, pero yo le decía, Espadachín. Luego de enseñarme todo lo que sabía, lo traicioné. No es la mejor historia de vida, pero es la mía-concluye.
-Oh...-consigo decir.
-Después de salir del circo, comencé mi vida criminal y por algún motivo llegué hasta Nueva York. S.H.I.E.L.D vio mi talento y me reclutó para ser agente, me costó mucho entrar, pero como sabes, no tanto salir-dice y rie el final.

<<sé a que se refiere>>
-Sigue-logro decir a punto de acabar mi cerveza.
-S.H.I.E.L.D, es una organización peligrosa, corremos peligro-propone.
-El peligro ha estado toda mi vida a la vuelta de la esquina-digo.
-Eso me encanta de ti-dice un poco avergonzado.
Le doy un golpe en el hombro y rie a carcajadas.
-Esa es mi vida, ¿y la tuya?-pregunta.

<<Genial, lo que me faltaba>>

-No mucho-digo.
-¡Hay!, no creerás que me coma ese cuento, peleas mejor que yo y ¿dices eso?-suelta Clint.
-¿Qué quieres saber?-le digo derrotada ante su insistencia.
-Todo...-dice y abre los brazos como si estuviera en el Titanic. Otro que hace eso.
-¡Joder..!-suelto.
Sus ojos azules penetran mi mente y no sé porque, pero las palabras empiezan a salir sin que mi cerebro las procese. Solo diré lo importante; generalizaré.

-Esa fue mi vida resumida en...-digo y miro el reloj, son las onces de la noche-tres horas.
-¿Es una anciana?-dice sorprendido.
-¡Créeme!, a mi me sorprendió tanto como a ti-respondo.
-Te esteriliza...-suelta pero lo interumpo haciendo un gesto con la mano para hacer que pare.
-Si-murmuro.
-Es un problema menos-me dice Clint.
-Eso creo-contesto bajando la mirada.
Al ver mis pies, no me había dado cuenta de que no tenía zapatos. Hace frío.
-No puedo creerlo, eres muy fuerte-dice silenciosamente.
Sigo concentrada en el frío de mis pies y no respondo a su cumplido.
-Si  S.H.I.E.L.D te encuentra, te matará-añade.
-Eso es lo de menos-digo y busco otra cerveza.
Veo que está completamente confundido, así que trato de cambiar el tema diciendo:
-¿Sabes algo de S.H.I.E.L.D que me pueda ayudar?-pregunto y me siento.
-Puede que si-contesta con su sonrisa típica de cuando está de buen humor.
Voy conociendo a este hombre.
-¡Eee..., somos un equipo, puedes confiar en mi!-logro decir.
-Si, lo sé; solo quería que suplicaras-dice Clint.
Creo que mi rostro hace el gesto de "El grito", estoy casi segura; siento mi mandíbula caer al piso.
-¡¿Cómo?!-grito.
-Es broma Nat-se defiende.
-No me gustan tus bromas y no me digas 'Nat'-le recuerdo.
Pone los ojos en blanco.

Ya ha amanecido, los pájaros cantan, los niños gritan, la gente hace deporte  y hay gritos de auxilio.

<<¿Qué?>>

No pasan más de dos segundos y ya he cogido mis zapatos, ahora corro como desesperada para salir de mi apartamento y ayudar a quien lo necesite (bueno, para salir del hotel porque no tengo apartamento).

<<¿En qué momento me convertí en una heroina>>

La ironía es evidente. ¿Mato a todo el que se le atraviesa y ahora quiero ayudar a alguien?. ¿Acaso me drogué? o ¿Clint me drogó?.
-¡Ya voy!-chillo por el pasillo.
Hay una puerta semi-abierta, entro, pero sólo logro ver a una abuelita hacer cardio. Redondeo su edad en ochenta años. Que tierna; cree vivir mas haciendo ejercicio, ojalá muera pronto.

<<La mañana más rara de la vida>>

Salgo y escucho con atención, es al final del pasillo.

Mi corazón y mi mente no trabajan juntos, el corazón hace que ayude, pero la mente me dice que deje así y no me meta en mas problemas. ¿Qué podría pasar?.
Tiro la puerta de una patada, la escena es terrorífica. Una chica siendo secuestrada, nada nuevo para mi, pero verlo en otra persona es traumante.
-¡Déjala!-le grito al sujeto.
-No, viene de Rusia y es una asesina-contesta gritando.

<<Hay no, ahora no>>

Me las doy de heroina (otra vez) y digo:
-Yo soy Natasha Romanov-
Él la suelta y se dirige a mi, despacio, luego acelera y no me di cuenta, pero ya estoy corriendo por el pasillo.
-No eres gallina-dice mi mente.
Me detengo y volteo.
-Ven aquí-digo preparándome para luchar con mis puños puestos.
Viene hacia mí y comienza la lucha, hace rato no hago esto.
Entre gritos míos y suyos, logro decir.
-¿Quién es?-
-Vengo de S.H.I.E.L.D-contesta dándome un puño en la cien.

<<S.H.I.E.L.D hasta en la sopa>>

-¿Qué quiere?-lo interrogo.
Tengo entendido que no es un buen momento.
-¡Llevarla a precentar cargos!-grita dándome patas.

Caigo al suelo.

Mi ojo morado, mi nariz repleta de sangre, pero sigo ilesa.
-Jamás-niego.
-¿Con que no?, heeeee...-se burla pero cae al suelo.
Su torso tiene clavado una flecha. Apenas diviso el final del pasillo, veo a Clint y su arco (comienzo a querer ese arco).
-¿Qué?-pregunta el hombre moribundo.
-Te acabas de meter con La viuda negra-digo y muere ante mis ojos.
¡O si!, equipo Ojo de Halcón y Viuda Negra.