En la oscuridad de la habitación del primogénito de la familia Afton se removía un pequeño bebé.
Gregory que había dormido gustosamente habría sus ojos, pero no por algo bueno.
El hambre que pedía su estómago era la causante, quería comer. Vio a su alrededor y todo estaba oscuro, solo podría diferenciar la poca iluminación y el pecho de una persona.
Supo que debe ser el del que lo está cuidando.
Si es ahora un bebé debe pedir como uno.
Sin perder tiempo, empieza moverlo con sus pies y manos a no ver resultado empieza a lloriquear.
El estómago le ruge, quiere comida y no le hace caso. Eso lo frustra más que lo suelta con un llanto.
Eso fue suficiente para levantar de golpe al adolescente.
Una vez despierto, empieza a calmar a Gregory con mecerlo con cuidado, eso bajo la intensidad del llanto, pero no quito del todo los lloriqueos.
Michael pensó rápidamente, su cerebro que estaba ido pudo procesar una de las posibles razones del porque lloraba.
─Tienes hambres Gregory─ eso fue suficiente para callarlo, obteniendo la respuesta con la mirada suplicante que le daba el pequeño ─Ahorita te preparo la leche, pero primero tengo que conseguir algo─ la cara de Gregory cambio a un puchero ─Es para que puedas comer.
Por una razón Michael siente que el bebé puede entenderlo, no quiere pensar que el sueño lo está alucinando, pero cree que es la verdad.
Saca la cabeza en la puerta de su habitación, no ve a nadie.
Sale de la habitación, con Gregory en un brazo pegado a su cuerpo y con el otro sosteniendo una linterna camina hacia el ático de la casa. Agradece de no haberle hecho cambio a la casa, después que se quedara solo, sino ahorita no se acordaría en donde estaría cada zona de la casa.
El adolescente le pide al pequeño que no haga ruido.
Una vez que está arriba, empieza a buscar con la linterna la caja que tiene algunos artículos de cuando él y sus hermanos fueron bebé.
Lo encontró y empezó a husmear la caja, había muñeco, sonaja y muchas cosas que tal vez lo use, pero primero debe encontrar lo que le hizo subir aquí.
Agradece internamente a su madre por guardarlo, saco un biberón, uno de tapa rosa.
Eso ofendió al pequeño, él no es niña.
El adolescente no se había percatado de su gesto, porque estaba concentrado en dejar las cajas como si nadie hubiera estado allí.
Cuando iba a bajar, escucha otro lloriqueo como si fuera reclamo, lo bueno es que fue bajo.
─Lo siento superstar, pero es el que está en mejor condición, ya mañana te compro uno nuevo.
La mención del apodo sorprendió al pequeño y más por ser un apodo que solo lo utiliza Freddy hacía él, así que lo mira por uno momento mientras que siente como baja de la escalera del ático, sin embargo, el hambre fue mayor que hizo que se concentrada en no gritar por eso.
Camina sigilosamente por el pasillo, llega a su habitación para agarrar la leche, luego regresa al pasillo, baja la escalera y llega a la entrada de la cocina. Estando ahí suelta el aire que inconsciente retuvo.
Se dirige al sofá, deja al pequeño y le dice que no va demorar mucho.
Regresa a la cocina, prende la luz y empieza a preparar el alimento del pequeño.
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Hasta el cambio
FanfictionRecorriendo las calles que alguna vez pisaste en el pasado o ¿presente?, sin conocer hasta cuando durará en esta vida que ya no es suya, una que ya vio pasar. Habiendo algo diferente, con bebé en brazos, con la oportunidad de salvar a su familia a s...