43- Ecape. (2/2)

75 5 2
                                    




Peter había presenciado toda la brutalidad desatada por Quetzal contra los enfermeros, y aunque una parte de él debería sentirse horrorizada, en realidad sentía una extraña liberación al saber que aquellos hombres habían recibido su merecido.

A medida que avanzaban por los pasillos oscuros y fríos, la curación acelerada de su cuerpo le permitía moverse con mayor facilidad, sin necesidad de apoyo. Sus heridas, aunque profundas, sanaban a un ritmo impresionante.

"¿Cómo te sientes?" preguntó Quetzal, su voz solo era un susurro en la penumbra.

"Mejor," respondió Peter, flexionando los dedos de sus manos para probar su fuerza. "Suficiente para seguir adelante sin ayuda."

"Buena señal," comentó Giovanni, que estaba más adelante, vigilando con cautela cada esquina. "Tenemos que mantenernos alerta. No sabemos cuántos más haya en el camino."

Mientras avanzaban, el grupo se encontró con pequeños grupos de concubinos novatos, niños que también buscaban escapar. Aunque estos jóvenes no tendrían piedad si capturaban a Peter y los demás, Quetzal y su grupo se aseguraron de usar solo golpes no letales para neutralizarlos y seguir adelante.

"¡Atrás!" exclamó uno de los novatos, un niño de unos 14 años con ojos llenos de miedo. "No queremos herirlos, pero no podemos dejarlos ir."

"No queremos lastimarlos," replicó Alex, tomando la delantera. "Solo queremos salir de aquí. Déjennos pasar y nadie saldrá herido."

Un intercambio rápido de golpes siguió, con Alex y Quetzal moviéndose con cuidado para incapacitar a los jóvenes sin causarles daño permanente. Peter, aún sintiendo los efectos de su curación, ayudó a sujetar a uno de los chicos con un movimiento bien calculado.

"Esto está empezando a parecerse a una pesadilla interminable," murmuró Peter mientras seguían avanzando, dejando a los niños detrás.

"No podemos detenernos ahora," dijo Quetzal con firmeza. "Si nos atrapan de nuevo, no tendremos la misma suerte."

"¿Qué hacemos entonces?" preguntó Giovanni. "No podemos seguir así indefinidamente."

Alex, que había estado en silencio durante un rato, finalmente habló. "Tengo una idea, pero es arriesgada."

"¿Cuál?" preguntó Quetzal con los ojos fijos en Alex.

"El helipuerto," respondió Alex. "Podemos intentar llegar al helipuerto y usar una de las naves para escapar. No podremos llegar a los autos con vida, y no podemos seguir enfrentándonos a más guardias."

"¿El helipuerto?" repitió Peter con tono incrédulo. "¿Crees que podremos llegar hasta allí sin que nos vean?"

"Es nuestra única opción," dijo Alex con determinación. "Sé que suena desesperado, pero es nuestra mejor oportunidad. Conozco una ruta que podría llevarnos allí sin ser detectados, o al menos minimizando los encuentros."

Quetzal asintió lentamente, evaluando la situación. "Está bien, Alex. Tu nos guiarás. ¿Cuál es el camino?"

Alex se inclinó hacia adelante, utilizando el tenue resplandor de una lámpara de emergencia para trazar un mapa improvisado en el polvo del suelo. "Tomaremos este corredor hacia el este, luego subiremos por la escalera de servicio aquí. Eso nos llevará a un pasillo que bordea la zona de experimentación, desde allí, una escalera nos llevará directamente al helipuerto."

Giovanni se inclinó para ver mejor. "¿Y qué pasa si nos encontramos con más guardias?"

"Seremos rápidos y silenciosos," dijo Alex. "Y si tenemos que pelear, lo haremos."

🖤🕸️ 𝐒𝐩𝐢𝐝𝐞𝐫-𝐦𝐚𝐧: 𝐻𝑒 𝐹𝑒𝑒𝓁𝓈 𝐿𝒾𝓀𝑒 𝐻𝑜𝓂𝑒 🕸️🖤 Peter Parker x Male OC / Male ReaderDonde viven las historias. Descúbrelo ahora