Lies, Lust and Chaotic Love

Capitulo 12.

Grayson abría los ojos, estaba desnudo en la cama de Rhea, a su lado ella durmiendo aún. Waller buscó su celular y ve la hora, notando que ya debería estar listo para salir al trabajo, se levantó de golpe maldiciendo todo, aquello despertó a Rhea, se dio cuenta que ella igual estaba atrasada, también se levantó rápido, Grayson tuvo que ir al automovil a buscar su mochila, como se suponía que se iba a quedar con Austin por fortuna andaba trayendo todo para irse directo al trabajo, ya bañados y sin desayunar ambos salieron en dirección a cumplir con la jornada laboral.

Grayson mientras manejaba no dejaba de pensar que esa noche se suponía que la pasaría con Austin, pero ahí estaba saliendo de la casa y de la cama de Ripley, la sensación que sentía era demasiado extraña, mientras más sabía que no debían seguir esa relación paralela, más se necesitaban y deseaban.

El día avanzó, Grayson dio sus clases, al salir pasó a su casa a buscar sus cosas, como prometió esta vez si iría dónde Austin,  pasó al Gimnasio como de costumbre, saludó a los compañeros de Austin, y de pasada a Austin a la distancia, quién estaba aún trabajando entrenando a dos chicas muy guapas, cuando ellas terminaban el entrenamiento pasaron cerca de Waller susurraron algo, entre lo que alcanzó a escuchar estaban hablando algo de él, fue silenciosamente en dirección a dónde estaban las chicas, era un pasillo previo a la división de duchas femeninas y maculinas, dónde los que entrenaban guardaban sus cosas, y se paró atrás escuchando la conversa de ellas 

—Austin es tan guapo no puedo creer que sea gay— 

—que desperdicio, por eso mientras le decía que me ayude con los ejercicios y le coqueteaba nunca me miró ni un poquito— se quejó una

—su novio igual es guapo—

—mentira, está todo feo— 

Grayson fingió una tos, haciendose notar, las tipas voltean y lo ven ahí, notó esa sensación de ''tragame tierra'' de ellas, sobretodo la que lo llamó feo.

—sabían que venir a mirar a los personal trainers e intentar coquetearles se llama acoso—  

—no sabíamos que estabas ahí, disculpa— habló una de las chicas muy nerviosa, Grayson solo dibujó una amplia sonrisa

—no me interesan sus disculpas ni lo que digan— dice mientras se encoje de hombros  —solo venía a decirles que Austin no le prestará más sus servicios de entrenador persona, pueden cambiarse a Jakara, o Julios, o quién sea, pero no más con él, gracias— dijo y simplemente se retiró dejando a las chicas sacada de onda.

En eso ve que Austin estaba hablando con Jakara, se acercó a ellos

 —Hola Jak, perdón que te robe a tu compañero de trabajo— dice jalando la mano de Austin para llevarselo a hacer las rutinas juntos.

—¿como te fue con tus pruebas?— cuestionó Austin recordando la noche anterior

—bien, las revisé y pude entregarlas a tiempo— respondió sonriendo, posteriormente tomó asiento en el banco para levantar pesas —por cierto, tienes dos clientas menos— le comentó a Austin, este frunció el ceño

—¿qué?—

—esas que estabas entrenando recién—

—de que hablas, Tay con Chrissy son mis clientas de hace tiempo— se quejó Austin, Grayson se puso serio 

—¿sabes las cosas que hablan a tus espaldas?— Austin solo negó con la cabeza —ambas te coquetean y dicen que no pueden creer que estés conmigo y no con ellas, y dicen un montón de cosas más, así que me tomé la libertad de decrirles que se cambien de entrenador— Austin solo miró con rabia a su novio, pero ya no dijo nada más, odiaba que Grayson tomara decisiones por él, no era primera vez que lo hacía, pero al final del día el amor que tenía por él era incondicional, tanto de soportar situaciones así.