Mack y Yue estaban sentadas juntas en la sala de espera, esperando impacientes a que las llamara el doctor Mendoza. Ambas miraban nerviosas hacia la puerta, cada segundo que pasaba parecía una eternidad. Desde la plática de ayer con su Nona ,les preocupaba que la enfermedad hubiera avanzado.
Finalmente, el doctor Mendoza apareció en la puerta y las llamó por sus nombres. Entraron juntas, tratando de mantener la calma frente a la situación.
El consultorio que tenían en la casa de la Nona era cálido y acogedor, lo que alivió un poco la tensión que sentían. El doctor Mendoza, con su sonrisa gentil, las hizo sentir bienvenidas.
-Hola Mack, hola Yue. Gracias por venir hoy. Entiendo que están preocupadas por la señora Catalina. Quiero asegurarles que estoy aquí para ayudarlas y responder todas sus preguntas -dijo el doctor Mendoza con calma.
Mack asintió. La preocupación por su nona pesaba en su mente mientras el doctor comenzaba a explicar.
-Primero que todo, me gustaría explicarles qué es el Alzheimer. Es una enfermedad neurodegenerativa progresiva que afecta principalmente la memoria, el pensamiento y la conducta. A medida que la enfermedad avanza, las células del cerebro se dañan y eventualmente mueren, lo que lleva a una disminución en la función cerebral -explicó el doctor Smith de manera comprensible.
Mack y Yue escuchaban atentamente, sintiendo un nudo en la garganta al pensar en lo que eso significaba para su nona.
-¿Cómo se diagnostica el Alzheimer? -preguntó está vez Yue , tratando de entender mejor lo que vendría a continuación.
El doctor Mendoza le explicó que el Alzheimer se presenta en varias etapas, desde los primeros signos de pérdida de memoria leve hasta etapas más avanzadas donde los pacientes pueden tener dificultad para llevar a cabo tareas diarias simples.
-El diagnóstico del Alzheimer suele involucrar una evaluación completa de la historia clínica del paciente, pruebas neuropsicológicas y pruebas de imagen cerebral, como una resonancia magnética o una tomografía computarizada. Estas pruebas nos ayudan a descartar otras causas posibles de los síntomas y a confirmar el diagnóstico de Alzheimer -respondió el doctor Smith con calma.
Mack escuchaba atentamente, tomando notas mentales de todo lo que decía el médico.
-Es importante saber que actualmente no hay cura para el Alzheimer, pero existen tratamientos y terapias que pueden ayudar a mejorar la calidad de vida de los pacientes y a ralentizar el avance de la enfermedad en algunos casos -continuó el doctor Mendoza.
Ambas se sentían abrumadas conforme avanzaba la información
-¿Y cuánto tiempo puede durar la enfermedad? -preguntó Mack con un hilo de voz.
El doctor Mendoza reflexionó antes de responder.
-El Alzheimer es una enfermedad que progresa de manera diferente en cada persona. Puede durar de varios años a más de una década, dependiendo de factores individuales. Es importante recordar que cada paciente y cada situación son únicas -explicó el médico con compasión.
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Entre Nosotros [TERMINADA] (En Edición)
Подростковая литература¿Después de la tormenta sale el sol? La vida de Makenzie white no ah sido fácil, hace cinco años perdió a sus progenitores pero no solo basto con la perdida de sus padres si no también con la de su bebé de apenas dos meses. El tiempo de sanación f...