Capítulo 9

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¿Solo un polvo?

Hailey.
Estire el brazo dispuesta a  coger un pequeño cupcake de la vitrina de postres,— el cual por mi parte tengo que decir, que estaba claro que nadie más se comería. —hasta que Johny chasqueó la lengua.

—Hailey ¿cuántos de esos te has comido ya?

—Demasiados diría yo. —Añadió Nicolle.

Los mire irritada.

—¿Que más os da? —Les pregunté. —No he desayunado esta mañana, dejad me en paz.

—Pues que son postres para vender y no para que te los comas cuando te de la gana. —Gruño Billy.

—Pero es que están muy buenos. —Dije con la boca llena.

Eso hizo que le cambiara la cara de inmediato.

—¿Verdad que sí? Normal que lo estén, si los hice yo mismo. —Dijo muy orgulloso.

—Te falta mencionar que llevan demasiado azúcar. —Johny puso cara de asco. —¿Quieres terminar como Bill?

El aludido lo fulminó con la mirada.

—¿A qué te refieres con "como Bill".

Johny se limitó a señalar su barriga.

Sí que era verdad que estaba un poco gordito.

Bueno tal vez mas que solo un poquito.

Pero a su edad ¿qué más daba?

Bill se puso rojo y justo cuando pensé que iba a escupir fuego por la boca como un dragón, su mirada se posó detrás mío.

Me gire para ver a Jules y Josh hechando un ojo a los postres de la vitrina.

Jules me sonrió nada más vernos.

—¡Amiguis! ¿Qué tal estáis? Cuánto tiempo sin vernos.

—Nos vimos hace dos días. —Dijo Nicolle.

Aproveche la distracción para hacerme con ese preciado cupcake que parecía llamar me.

Me lo comí a una velocidad impresionante para que ninguno de mis compañeros pudiera evitar lo.

—El día que te hagas diabética me reiré en tu cara. —Johny suspiró.

—Trato hecho. —Aseguré. —Pero mientras tanto deja me tranquila.

—¿Por qué? —Preguntó Jules. —¿Qué pasa?

—Lleva todo el día zampando de esos. —Me acusó Nicky.

—¡Mentira! Solo me he comido
unos....—empecé a hacer las cuentas en mi cabeza. —¿Tres?

—Ya, y has llegado hace media hora,
Hai. —Recalcó Johny. —Te has comido uno cada diez minutos, y lo más probable es que te comas otro en diez minutos.

De inmediato escuche a alguien reír se.

Era Josh.

—No jodas. —Le oí decir.

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