Alpha's Hard Romance

Capítulo 15: El Despertar de Mikaela

Mikaela se alzó completamente, Damian tomó su forma de licántropo y tomó las manos de ella.

—Volviste. —Le dijo Damian.

—Sí. —Respondió Mikaela con algunas lágrimas.

Su loba interior, su licántropo había regresado. Mikaela ya estaba por fin completa de nuevo, su forma licántropo después de un año había regresado.

—Quiere decir, que haz superado todo. —Le sonrió Damian.

—Todo indica que es así. —Respondió Mikaela.

Damian le abrazó, pero no le quito él hecho de que fuera curioso en algo, ya probó a Mikaela en su forma humana y en forma de lobo, pero... ¿Su licántropo?

Damian mordisquea suavemente la oreja derecha de Mikaela y ella al percatarse, entierra sus garras en el pecho de él, sin dañarme claro.

—Ni se te ocurra Damian. —Le gruñó Mikaela.

— ¿Oh sino qué? —Le respondió Damian.

—Me las vas a pagar.

—Ahora no, tal vez después...

꧁☾︎𝓓𝓪𝓶𝓲𝓪𝓷☽︎ ᴀʜʀ ☾︎𝓜𝓲𝓴𝓪𝓮𝓵𝓪☽︎꧂

Damian y Mikaela llegaron a la residencia, aún en sus formas de licántropos, aunque para eso tuvieron que pasar con mucho cuidado de no ser vistos, pero... Damian traía cargando a Mikaela en su espalda, dado que por una excelente razón, no podía caminar.

Ellos dos son alfas y como Damian había dicho, su orgullo es tremendamente fuerte y por ende, a Mikaela le costó un par de buenas estocadas de su parte admitir que él es su Alfa, cosa que Mikaela no quería admitirle.

— ¿Quién es tu Alfa, Mikaela? —Le preguntó Damian con una risilla.

Mikaela gruñó-

—Dime quien o en la noche no te dejaré dormir. —Le dijo triunfante.

— ¡Ni pienses que te diré de nuevo tales cosas! —Le gruñó Mikaela.

—De acuerdo, en la noche será.

Mikaela bufa.

Dado que ella venía en la espalda de él y tanto él le molestaba con aquella pregunta, Mikaela se le prendió el foco imaginario para devolverle un poco la molestia que le hizo pasar. Por lo que movió su cadera en círculos y de arriba hacía abajo, Damian se crispó un poco al sentir el movimiento detrás de él.

—Mikaela. —Le gruñe levemente Damian.— No.

— ¿No qué? —Le preguntó Mikaela con una sonrisilla.— Solo me estoy acomodando.

—Solo porque ya estamos llegando que si no, te doy la vuelta y te lo vuelvo a hacer.

—Mira, mira que salvaje me saliste.

Mikaela le tocó una de sus orejas con suavidad, causándole que brincará levemente y bajo sus orejas.

—Oh, mira que curioso ¿Qué tan sensible eres aquí? —Le preguntó Mikaela juguetona.

—Mi-Mikaela. —Le habló Damian alterado.

Mikaela comenzó a lamer y morder su oreja con cuidado, ella sabe que son delicadas las orejas, aunque también es un modo muy bueno para provocar, que claro, cuando ella sintió que Damian sujeto sus piernas con un poco más de fuerza, fue ahí cuando comprendió que era hora de huir.

Así que de un saltó se desprendió de él y corrió hacía la residencia.

— ¡V-Vuelve aquí seductora! —Le grito Damian.