Zhaniiiee amor tu hombre quiere verte en acción dulzura demuestra por que eres mi amado conejo salvaje, grito Yibo desde su palco al ver que el conejito no tenía ganas de iniciar una pelea, pero lejos de hacerle el menor caso el conejo se recostó sobre su espalda para mostrar su panza peluda, Quing Su que miraba y oía todo con atención no espero más para arrojarse a la acción, esto se acabaría en este preciso instante, no le importaba que el público la abucheara por atacar al conejo mientras estaba desprevenido rascándose la espalda con el piso.
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De un fuerte zarpaso la hiena rasgo el vientre del estúpido conejo esparciendo una gran cantidad de sangre por toda la arena, haaaaaaaaaackkkk que hoorrroorrr se oyó el grito de la multitud, Yibo sonreía de manera diabólica al ver lo rojo manchar las patitas de su conejo, seguramente cuando todo esto acabara el tendria que lavar toda esa suciedad del pelaje de su revoltoso, pero Quing Su solo se dio cuenta de que no era el plasma del conejo la que se derramaba por el piso cuando quiso abrir su ojo izquierdo, un fuerte dolor le hizo pegar semejante alarido que porvoco más escándalo en los palcos.
Lo que había ocurrido en realidad es que al momento en que ella llegó hasta donde el conejo estaba echado sus garras parecieron tocar la pancita del roedor pero en realidad lo que chorreo de sangre fue que al saltar sobre ella para esquivar las garras de la hiena con las patas traseras, Zhan había rasgado el ojo izquierdo de la mujer probocandole un inmenso dolor, así comenzó la dura batalla por el macho alfa de los leones, nadie podía rendirse, ninguno de los dos. podría renunciar lo único que quedaba era terminar esta pelea de manera rápida para evitar morir en el intento.
Desafortunadamente para la dama, el conejo no era una bola tierna de peditos como lo habían asegurado los Yao íntimos amigos de Jin Guansang, por lo que acababa de pasar esta pelea había iniciado con una ventaja más que fuerte para el hervivoro y eso una Jin hiena no lo podía permitir, cerrando de nuevo su ojo dañado, para evitar que este siguiera doliendo, la hiena dio un jiro al rededor para buscar a donde se había escondido el maldito roedor traicionero.
Pero al ver que la bola pintada de rojo se restregaba en uno de los postes para quitarse un poco de plasma de las patas traseras, se lanzó a él con la boca abierta, no era momento de una pelea elegante, con este ataque donde perdió uno de sus ojos, se había dado cuenta que el panzon conejo no era tan indefenso como todos creian, iba a comerlo de un bocado sin importar que la tacharan de anti ética, ganaría la pelea aunque sufriera de gases por el resto de la semana, pues comerse a un híbrido con todo y tripas, era un sufrimiento para la digestión de todo cambia forma.
Zhan restregaba sus peludas patitas en el poste de la arena, los leones en las gradas lo vitoreban como si de un gladiador se tratara, Yibo no quitaba los ojos de su lindo conejo , Zixuan se amarraba al asiento donde estaba sentado con todas sus fuerzas, no podía intervenir por mucho que quisiera, el no era todavía el lider de su clan.
Guansang ni siquiera estaba poniendo atención a lo que pasaba por más que los gritos del público era ensordecedor, Mingjue tenía la boca abierta al ver como ese conejo había hecho una maniobra exclusiva de su familia, ese salto con patada invertida, era enseñada solo a los miembros más importantes de la familia Nie, era como una joya que se hereda a de líder a líder, como es que un conejo que no tenía nada que ver con los Nie,pudo hacer semejante moviendo y lograrlo de manera tan magistral, que había arrancado el ojo de esa imponente hiena en el proceso.
El conejo sintió otra ves que su vida corría peligro, por el acercamiento del aura asesina que desprendía la hiena Su, más ahora, que esta se encontraba herida en su orgullo y deseosa de desquitarse, la vio acercarse a gran velocidad, traía la boca abierta, su aliento apestosos le proboco un poco de asco, pero debía terminar lo que había empezado.
Cuando la tenia a unos centímetros de el, Zhan también abrió su boquita, sus largos dientes delanteros se volvieron tan puntiagudos como una largas agujas afiladas, al estar frente a frente, otro alarido más de dolor inundó el coliseo, la hiena sujetaba su boca con las garras, tratando de parar el torrrende de plasma y saliba que salia de su boca, Zhan arrojo la lengua de la hiena al piso, restregaba ahora su cara en el poste pues el liquido carmesi que que salio del órgano lengual, que le arranco a la joven bestia, había caído sobre su blanca cara, si la sangre del ojo de la hiena olía mal, la de su lengua apestaba a caño descompuesto.
Los leones se volvieron locos, gritaban, gruñian y se transformaron para rugir de emoción, por la masacre que el conejito esposo se su líder estaba dando, Zixuan corrió hasta el palco de Mingjue para que detuviera la pelea, antes de que ese demonio peludo y bañado en la sangre de su hermana, no acabara asesinandola, pero para el Nie esto no era posible el solo era un invitado no podía parar una pelea que el no había solicitado.
Más bien aquí había una sola persona que podía decir basta y ese estaba más que encendido manoseando a unas leonas que los ancianos habían enviado como sus acompañantes, el dolor que la hiena sentía en estén momento era horrible, no podía gritar por que ya no podía ni abrir su boca del miedo que tenía que ese endiablado conejo se metiera por su boca para arrancar su garganta no podía llorar por que su ojo izquierdo le taladraba en la cabeza cada que lo abría.
Ahora estaba a punto de desmayarse por la cantidad de líquido plasmático que estaba perdiendo, como es que le habían mentido tanto durante estos 18 años de su vida, según su padre ella era la mejor de su casa, según su madre ella había logrado sobrepasar a sus cinco hermanos y había salido victoriosa de ese proceso cruel de selección del más apto, entonces por qué estaba perdiendo frente a esa regordeta bola de pelos, esto debía ser una pesadilla.
Pero no tubo tiempos de seguir autoflajelandose por que por primera ves en esta tarde el conejito al que trato de asesinar se acercó hacia ella, los rígidos de los leones se oía en todo el estadio, el bribón conejo miró a su presa con rabia, abrió su biquita mostrando sus lindos dientecitos delanteros y un fuerte rígido salio de su garganta ahora estaba una cosa más que clara este conejo era de una especie muy particular, extraña y casi extinta, Zhan era un conejo Minileon.
