CAPITULO 1 - DISCUSIONES Y DESICIONES

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Las vacaciones eran aburridas, no había nada interesante o nuevo para mí más que levantarme, cepillarme los dientes y seguir con mi rutina de todos los días.

Y con rutina claramente me refería a pasar encerrado, pegado a la laptop o el celular en mi habitación casi todo el día.

Los lugares a los que más salía eran la tienda o la casa de mi abuela, que se encontraba a una cuadra y media de mi casa.

En todas las vacaciones me dediqué a realizar grabaciones para plataformas de videos cortos o hacer videos tutoriales sobre cómo conseguir objetos en videojuegos.

Era mi pasatiempo favorito; después de todo, si ese pasatiempo se convertía en trabajo en un futuro, valdría la pena el tiempo invertido. Parece una vida normal de un chico introvertido que no socializa mucho, pero en realidad era todo lo contrario.

—Supongo que me falta agarrar confianza para entablar amistades —suspiré.

Las vacaciones estaban a punto de terminar y tenía un pequeño problema.

Mi pareja... oh bueno, podría decirse así. Ni si quiera entablábamos palabras desde hace un mes.

Mi problema principal era mi pareja. Y sí, puede sonar egoísta de mi parte, porque ¿quién dice que su pareja es un problema?

—Yo —me retracté a mí mismo en forma de burla.

En el semestre anterior, alquilaba con mi pareja. Al final del semestre, ella me hizo prometerle ir a visitarla seguido, algo que sí podría ser posible, ya que vivíamos a tan solo dos horas y media de distancia.

Lo sé, uno, cuando está enamorado, viaja distancias que nunca creías qué harías, en especial porque somos de diferentes lugares.

La verdad, en esos dos meses que no nos vimos, tuvimos discusiones por mensajes. Muchas discusiones que para mí eran insignificantes, pero para ella no; le molestaba demasiado mi falta de interés —así lo llamaba ella al referirse a cómo me comportaba.

Y es que cuando teníamos discusiones, trataba de evitarlas porque no me gusta discutir, y menos aún si es con mi pareja. Hablaba con ella, hasta el punto en que a ambos nos ganaba el orgullo y nos dejábamos de hablar hasta el siguiente día.

Ahí es donde entra mi falta de interés

Soné como si fuera ella, pero soy el tipo de persona que, así hayamos discutido, peleado o dejarnos de hablar todo un día entero, te iba a volver a tratar como si nada de eso hubiera pasado, como si recién nos hubiéramos reconciliado.

Así actuaba yo con ella durante nuestras peleas

Entonces, a ella le disgustaban esas actitudes que tomaba de ignorar nuestras peleas y hablarle como si nada. Al actuar así, me decía...

***

Entonces Nayel, ¿De verdad no te importa cómo me siento, ¿verdad?

No es que no me importe, simplemente no veo la necesidad de seguir enojados.

***

Al responder así, se enojaba aún más y así continuaban nuestras discusiones amorosas. Hasta el día en que ya no soporté más, tampoco sus actitudes, y no le volví a hablar. Estuvimos así por un mes entero, hasta que los días comenzaron a notarse más porque íbamos a volver a entrar a la universidad.

Nuestro orgullo era muy fuerte en ese entonces; ninguno de los dos nos hablamos durante ese mes y creo que no hubiéramos entablado palabras si no fuera porque alquilábamos juntos.

Un collar de pétaloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora