capítulo ocho

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─¡Haerin! ─Danielle aún no se acostumbraba a aquella sensación sobrecogedora. Haerin entre sus piernas, sus manos sujetando los muslos de Marsh y besándola, recorriendo con sus finos y suaves labios aquella zona tan sensible de Danielle, delicada y tan húmeda en aquel momento. Los pulgares de Haerin a cada lado mientras abría los labios inferiores de Danielle, rosados y algo hinchados mientras la húmeda y pequeña lengua de Haerin chocaba contra el agujero del coño de Danielle. ─¡Ahm, Haerin...! ─Danielle tiró con más fuerza del cabello de Kang y ésta volvió a cerrar los ojos, disfrutando del momento. 

Al cabo de casi un minuto, Danielle se corrió ligeramente, sus piernas volvieron a temblar y su voz se quebró. ─H-Haerin.... ─Danielle respiraba agitadamente, con el pecho subiendo y bajando y el cabello corto revuelto, las mejillas rojas, ─Esto ya es demasiado.... ─Haerin negó y su mano se deslizó bajo la mandíbula de Danielle.

─Y aún nos queda más por hacer, cariño. ─Haerin susurró a un lado de la cara de Danielle, su voz ronca sorprendió y embriagó a Danielle, disfrutando de su forma de hablarle, de tratarla, de complacerla. ─¿Estás segura de que no quieres más...?

─Mentira, claro que quiero más. ─Danielle fue completamente sincera y Haerin la besó en la mejilla. ─P-por favor, Haerin, te lo pido....

─Tranquila, unnie. ─Haerin alargó la mano para tomar el frasquito con el lubricante, en cuanto el líquido rosado y pegajoso rozó sus dedos, Danielle no pudo evitar ponerse un poco tensa y nerviosa en ese minuto, ─Muy bien, allá voy.... ─Danielle cerró los ojos con fuerza, pero su expresión cambió cuando Haerin simplemente comenzó a masturbarla con los dedos, sin penetración, simplemente acariciando alrededor y de vez en cuando sobre el clítoris. ─¿Danielle...?

─Oh, pensaba... Que ya lo harías... ─Danielle dijo avergonzada y Haerin esbozó una sonrisa. ─No te burles.

─Ya lo he hecho. ─después de eso Haerin introdujo uno de sus dedos en el interior del agujero de Danielle, ésta soltó conscientemente un par de gemidos y sus uñas arañaron la espalda de Haerin, casi desabrochándole el sujetador, ─Shh, tranquila, mi amor....

─Carajo, me tomaste por sorpresa.... ─Danielle hablaba temblorosa y Haerin siguió preparándola. ─Por favor, más....

─Con calma, dulzura. ─Haerin le besó la frente y finalmente apartó su mano.

Danielle observó tímidamente la forma en que Haerin extendía el líquido alrededor del juguete fálico, envolviendo su mano en un puño sobre la dura y suave longitud, moviéndose arriba y abajo a su alrededor, su mirada felina se encontró con la de Danielle y la otra fémina miró torpemente hacia el techo para "disimular", mordiéndose el labio inferior y aferrando lo que podía de las sábanas entre sus dedos. Calma, calma. ─¿Es el techo más bonito que yo...? ─Haerin rompió el silencio y Danielle le dirigió una mirada compungida y avergonzada, ─¿Uhm, Danielle?

─Sí, es bonito.... ─Danielle sonrió en breve ─Pero no tanto como tú. ─Haerin formó una pequeña mueca y Danielle rió bajito, olvidando que estaba nerviosa por un momento. ─Tú eres más guapa.

─Eso ya lo sé. ─Haerin se mordió el labio inferior, ─¿Abre las piernas, por favor?

¿Es una pregunta? Danielle asintió y lo hizo ─Lo que tú ordenes. ─Danielle le devolvió la misma mirada lujuriosa y Haerin se estremeció en su sitio.

Haerin la observó después de que Danielle abriera más las piernas, se fijó en las marcas que le había dejado en los muslos, incluso en los pechos y el cuello; Haerin acarició rápidamente con su mano libre entre las piernas de Danielle, sintiendo su punto caliente y oyendo a Marsh gemir de anticipación. Joder, su coño estaba húmedo y rosado como antes. El dildo recorrió los húmedos labios del coño de Danielle mientras Haerin empujaba sus caderas hacia arriba y hacia delante, tirando y agarrando a Danielle de sus muslos. Danielle hizo algo que Haerin no había planeado, pero aun así se lo permitió. Marsh apretó alrededor del eje mientras introducía la cabeza del pene de goma bastante grande en su coño, todo esto poco a poco. ─Uhm, Dani... ─Haerin gruñó y Danielle empujó sus caderas con más fuerza, impulsando la polla de Haerin más profundamente dentro de ella. ─Espera...

Ella Quiere; DaerinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora