En cuanto se acabó la película, salimos del cine, Catalina se ofreció a comprar pizza para cenar, así que caminamos junto a ella hacia la plaza de comida que no estaba tan lejos de las salas de cine, Guillermo caminaba a mi lado.
—Oye Carmen, un día de estos deberíamos salir, tú y yo solos, conozco un restaurante espectacular aquí en la ciudad— sugirió él
—Por supuesto, cuando quieras— contesté, él sonrió con una satisfacción, no lo comprendía, ¿tan emocionante era salir conmigo? Pensé, pero, no quise ser tan dura conmigo misma
—Bueno, pero, tendrías que darme la dirección de tu casa, Catalina nunca me ha llevado allí— agregó mirando a su hermana
—Claro, te la envío por mensaje, no me la sé de memoria— contesté apenada, a pesar que no sabía la dirección de la casa de Karlota, había podido llegar recordando cada calle
—Genial, ¿te parece el sábado por la tarde?— inquirió, menos mal descansaba los fines de semana
—Sí, me queda perfecto— comenté
—Chicos, voy al baño, ¿No necesitas ir, Carmen?— preguntó Catalina, estaba segura que me quería lejos de Camilo, lo cual era tonto
—Ah, no... no tengo ganas— respondí con sinceridad, no quería estar sola con esa chica
—¿Cami?— miró a su novio con el ceño fruncido
—No, tampoco tengo ganas, yo pediré la pizza— contestó sonriente, caminó hacia el negocio, Guillermo fue tras él, Catalina me sonrió con esa hipocresía y se alejó a los baños.
Al ver que Guillermo no estaba con Camilo, me coloqué junto a él que acarició mi cabello como ya era su costumbre, cerré los ojos un segundo mientras sonreía, de verdad me sentía segura a su lado, alejó su mano cuando Guillermo se acercó, tal vez no quería que este malinterpretara ese gesto tan tierno que siempre tenía conmigo.
—El pollo de allá huele delicioso— comentó, señalaba hacia el negocio de atrás—, compraré un poco para llevar luego
—Me gusta la comida china— añadí, también alcanzaba a percibir el olor
—Bien, ¿qué tipo de pizza quieren? — preguntó Camilo
—Vegetariana— sugirió Guillermo—, Catalina dice que ahora es vegetariana
—¿Desde cuándo? El viernes preparamos cortes de carne en clase, ella comió carne— cuestionó con su ceño fruncido
—No lo sé, ella siempre pide pizza vegetariana— contestó Guillermo confundido, yo sentía ganas de reír, pero, ellos estaban tan serios que preferí aguantar.
Catalina volvía del baño, mientras los chicos seguían discutiendo, ella parecía una súper modelo, tan alta, tan chica; sus ojos eran marrones o verdes, no estaba segura, sólo que si eran muy claros, tenía un cuerpo perfecto, su cabello castaño liso, lo traía muy largo, cubría toda su espalda.
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Algo Inesperado
Storie d'amoreCarmen no tuvo una buena infancia, sin embargo, tuvo momentos buenos que la mantuvieron de pie, cuando salió del orfanato, comenzó la búsqueda de una mujer que la apoyó mucho años atrás. Cuando pudo encontrar a esa gran amiga, le pidió ayuda para re...