𝗖𝗿𝗲𝗼 𝗾𝘂𝗲 𝘁𝗲 𝗮𝗺𝗼 (ʀᴏᴅʀɪᴠᴀɴ)

XVII

Había un silencio completo que invadia toda la habitación, no se oía absolutamente nada, eso hacía que hubiera una gran incomodidad de parte de los dos adultos, los dos estaban sentados en el sillón de la sala, algunas veces cruzaban miradas, pero las apartaba con rapidez sin decir nada, cosa que causó ese silencio tan profundo. Hace unos momentos Iván estaba llorando con fuerza intentando no hacer ruido, mientras que Rodrigo lo consolaba y abrazaba, el ambiente cambió drásticamente cuando el pelinegro dejó de llorar, Rodrigo nunca lo había visto así, ya que Iván casi nunca lloraba en frente de el, el alto tenía los ojos rojos e hinchados, no le gustaba verse así en frente de Rodrigo, se sentía muy vulnerable, le causaba molestia.

Rodrigo por otro lado, tenía su mirada fija en Iván, estaba preocupado por el, no le gustaba verlo llorar, parecía que no le importaba que había pasado el otro día, no estaba tan incómodo como lo estaba el pelinegro, quería decirle algo pero tenía miedo de empeorar más las cosas.

-Iván- el alto volteo a verlo -¿Te sientes mejor? - Pregunto.

-bien.

El castaño lo veía con preocupación, sabía que lo que decía Iván no era verdad, pero tampoco quería volverle a preguntar, no quería molestarlo después de lo que paso.

-Rodrigo, perdón, no quería que vieras eso - miraba al suelo mientras lo decía. -Quise explicarle, pero, creo que no salió bien- soltó una risa suave para olvidar el tema que paso hace un momento.

El de ojos verdes lo veía triste, estaba seguro de que para Iván era doloroso perder a alguien que de verdad quería, le dolía el pecho, no le gustaba verlo de esa manera.
De repente el bajo lo agarro de la mandíbula y lo vio a los ojos.

-Iván, no tienes la culpa de esto, esta bien que llores, todo el mundo llora.

El pelinegro lo veía a los ojos confundido, pero después de escuchar esas palabras sus ojos se pusieron cristalinos, no quería llorar, pero las palabras de Rodrigo se repitieron en su cabeza, sintiendo demasiado dolor.

Iván quitó las manos de su mandíbula y puso sus brazos alrededor del cuello de Rodrigo, abrazándolo con fuerza y intentando luchar con el llanto, mientras que de los labios del castaño no salió una palabra, sabía que su amigo no estaba tan bien, el alto deshizo el abrazo y lo volvio a mirar a los ojos, tenía la misma mirada que antes.

-Rodrigo, necesito tiempo a solas.

El más bajo lo vio mostrando una sonrisa suave, solto un simple "si" y se levantó del sillón, se dirigio a la puerta de la casa de Iván, volteo su cabeza para volverlo a ver, el pelinegro estaba sentado y con la cabeza mirando hacia el suelo, este suspiro intranquilo por dejarlo solo en un momento así, pero si Iván se lo pedía no iba a decir que no, no quería complicar más esta situación.

-Cuidate, por favor- se despidió abriendo la puerta para salir, sin notar alguna reacción de parte de su amigo, volvió a suspirar cansado y se fue.

Le preocupaba demasiado verlo de esa manera, sabía que esa chica tenía una gran relación con el, no sabía la razón del porque habían peleado, quería saberla pero decidió no preguntar, no en ese momento. En verdad le dolía verlo de esa manera, quería que sonriera pero no podía, no podía hacer nada al respecto, nada más que escucharlo llorar.

Rodrigo llego a su casa abriendo la puerta y entrando al lugar, vio como Barry se acercaba a él, y se agachó para acariciarlo de buena forma, después de unas caricias, se levantó y se acostó en su colchón, tirando el abrigo que tenía para solo quedar en una remera blanca, suspiro pensando en aquel chico que tanto le preocupaba, quería mandarle un mensaje, pero, ¿sería buena idea?
Rodrigo intentaba dormir pero su mente estaba llena de muchas cosas, no podía dejar de pensar y no dormía.

Hasta que lo logro, pero no había dormido más que dos horas, ahora el castaño estaba mirando al techo, el sol iluminaba la habitación desde su ventana, oyendo el canto de los pájaros, y el sonido de los autos pasando, estaba completamente cansado, no quería levantarse de la cama, suspiro cansado, y alcanzo su celular viéndolo, no había ni una sola notificación, solo la del clima.

-La puta qué me parió, que día de mierda.

Al leer la notificación se dio cuenta de que iba a ser un día muy soleado, molesto se sentó en el colchón, ese día si o si tendría que buscar un colchón bueno para ponerlo en su cama, no quería seguir en el piso, le daba frío.
Hace mucho no dormía tan poco, antes se la pasaba jugando al lol y ignoraba el hecho de dormir bien, solo dormía al menos dos horas o tres, después dejo de hacerlo, no recordaba el porqué.

Se levantó de su cama y se dirigio al baño para lavarse las manos y hacer sus necesidades, cuando salió del baño le sirvió comida a Barry y le dio algunas caricias y amor, luego de esto fue a la cocina, recordando como le hacía comida a Iván, este dio un salto de sorpresa, estaba tan molesto por no haber dormido bien, que se había olvidado por completo de su amigo, apago el fuego y sacó su celular, mirándolo, entro al chat de el pelinegro, no había ningún mensaje a parte del de el, ahora si estaba preocupado.

Decidio qué iba salir a buscarlo en su casa, cuando de repente le llego un mensaje y su celular vibró, con la esperanza de que fuera Iván vio la notificación, dándose cuenta de que spreen había prendido directo, este puso una mueca de confusión y entró a ver el directo. Iván se veía un poco mejor, tenía ojeras, pero sus ojos no estaban tan hinchados, este soltó un suspiro de tranquilidad, estaba feliz de que Iván estaba bien, hasta que le subió volumen, su cara paso a una de terror.

-Me daré un tiempo de twitch, volveré pero, por ahora no me siento tan bien así que me daré un tiempo de los streams - Expreso el alto.

Rodrigo se quedo sin reacción, en que estaba pensando Iván, ¿de verdad el iba a darse un tiempo por una chica? No lo entendía, Iván no era ese tipo de persona, ¿que cree que estaba haciendo? Tenía demasiadas preguntas, estaba muy confundido, dejo su celular a su lado y miró al suelo, tenía tantas preguntad, por que Iván lo le envío un mensaje antes de esto, el era su amigo, ¿por qué no le dijo?

Rodrigo cogio su celular y pensó en mandarle un mensaje al chico, pero quería hablar el tema en persona, quería que su amigo fuera sincero, su mente empezó a crear cosas, pensó en la posibilidad de que Iván si sentía amor por esa chica ¿Pero como? Acaso Iván no estaba enamorado de él, volteo la cabeza varias veces negando, no quería creer eso, no en este momento.

El de ojos verdes entró a bañarse con rapidez, se puso lo que encontró y salió de su casa, estaba caminando, pero quería correr, tampoco quería ser paranoico, pero el hecho de tan solo pensar que el pudiera sentir eso por ella le hizo sentir una sensación dolorosa en el pecho, tenía una intriga enorme de saber que le dijo a aquella chica para que le pegara a su chico.