Un omega reservado⁰² [yoonseok]

Trece: Querido amigo

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Lo único que Yoongi pudo pensar cuando lo tomaron es en que lo iban a matar, lo habian atrapado y ese era su final, de nada había servido sus pocos días de trabajo ni nada, todo se había ido a la mierda.

Fue estampado con fuerza en una pared cercana a la pensión, vaya, iban asesinarlo tras la pensión de Hoseok.

El hombre que lo habia agarrado no era nada más que su viejo amigo Kim Namjoon, compañero de recuerdos y de muchos robos.

Sus ojos se abrieron más de lo que podía y el alma le volvió al cuerpo.
Sujeto la muñeca del moreno con fuerza y la quito con brusquedad.

— ¡Eres un idiota Nam, me querías matar de un susto! — susurró y lo empujó para poder respirar en paz.

— ¿Es así como me recibes? ¿Dónde mierda estabas? Te desapareciste de la nada. — bramo muy enojado. 

— Cállate, baja la voz. ¿Cómo me encontraste? — dijo quedito.

— ¿Cómo no iba a reconocer a un maleante en una cafetería? ¿Qué haces allí Min? — habló.

— Shhh, baja la maldita voz quieres... — suspiró viendo a todos lados. — Y gracias por el cumplido, amigo.

— Para eso estamos ¿no? Ahora me vas a explicar ¿qué haces aquí?

— Me escapé ¿bien? — dijo.

— Mmm, no me digas. — asintió. — ¿Y de que mierda escapaste? Por que lo último que supe de ti es que le debías uan buena al gordo de Kim...

— ¡Lunas, cierra la boca! — tapo la boca del Alfa con su mano, justo como lo había hecho al unos momentos antes.

— ¿Qué mierda pasa? ¡Nadie te va escuchar! — quito la mano con la misma brusquedad que el mayor había hecho, amigos tal para cual.

— ¡Mi maldito arrendero si! Estoy en un maldito problema con el, lunas, el idiota ahora cree que me metí con el y...

— Oye oye ¿Qué?... — interrumpió el más alto.

— Lunas, solo... ¿Tienes un lugar donde pueda quedarme? No quiero llegar por hoy, te contaré las cosas en la mañana. — negó, estaba cansado.

— Bien, pero me lo dirás todo, TODO Min Yoongi. — señaló con su índice al mayor.

—¿Dónde quedó tu respeto idiota?
— negó riéndose.

—Se perdió cuando decidiste irte sin contarme a mi. — suspiró indignado.

—¡Luna vamonos ya! — Tomó de la chaqueta a Namjoon y salieron del callejón.

Por primera vez no quería llegar a su cama, a la que ya se había acostumbrado después de unos cuantos días. Y bueno, se sentía feliz de ver a su amigo, lo había dejado olvidado un poco sino es que decir que mucho, hablar con alguien sobre sus cosas le haría bien, y que mejor que su mejor amigo.

Caminaron por las frías calles compartiendo risas y cosas sin importancia, algo que alivio el alma de Yoongi, su amigo no había cambiado.

Llegaron al lugar donde se quedaba el moreno, al parecer también estaba quedándose en un cuarto de renta, pero no con un Omega malhumorado como el que tenía el, sino que al parecer según palabras dichas por su amigo, una abuelita beta que era de lo más amable. Estaba un poco alejado de donde el se quedaba, no entendía siquiera como es que Nam lo había encontrado así de fácil.

— Ahora, vas a contarme... — dictó el más alto dejándose caer en un mullido sillón qué tenia en su habitación.

— Nam... ¿Qué quieres que te cuente? — suspiró cansado, lo único que quería era echarse a dormir.