Lo prometido es deuda, aquí el maratón, espero les guste.
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Maratón 1/4
Ver sus manos manchadas de sangre, tratar de mover a su hermano y ver cómo este no se movía. Ya su garganta ardía de tanto gritar, preguntándose ¿Dónde mierda estaban los policías cuando los necesitaba?
Los minutos los sentía eternos, sentía como si todo se estuviera moviendo más lento, al ver cómo se llevaban a su hermano, ver las llaves de su auto enterradas en la muñeca izquierda de Juno, lo hizo sentir tan miserable.– Todo es mi culpa – susurro para el mismo, cayendo de rodillas al suelo para empezar a llorar – e-esto es mi culpa.
Su corazón dolía, sentía que todo el aire le estaba faltando, si él lo hubiera protegido más, si tan solo hubiera sido un buen hermano, nada de esto estuviera pasando.
¿Que fue lo que hizo mal? ¿Que era lo que estaba haciendo mal para que todo saliera así?
Por favor, solo una vez, por favor, haz que esto pare, Diosa Luna, por favor.
Su mundo se estaba cayendo y fue cuando sintió todo derrumbarse, cuando no pudo controlar su respiración, cayendo desmayado....
Jimin corría por aquellos pasillos del hospital como un loco, cuando recibió aquella llamada de que sus dos hijos estaban en el hospital, no dudo ni por un segundo salir de aquella oficina con el abogado para correr hacia el hospital, su lobo se sentía morir, no podía con tanto.
No le importaba que hubiera gente en el camino, el solo los empujaba con sus manos para llegar a recepción y preguntar por la salud de sus dos bebés.– Señorita – la beta lo miro con atención – mis dos hijos ingresaron hace una hora a este hospital, sus nombres son Kim Jungmin y Kim Juno.
La chica se dispuso a buscar en el computador aquellos nombres, claro que al ver el expediente médico de Kim Juno no pudo ocultar su mirada llena de tristeza.
– Sigame por favor – la beta lo guío hasta uno de los doctores – el le dirá todo lo que pasó con su hijo, lo siento mucho.
Al escuchar esa última frase hizo que su lobo empezará a rasguñar por dentro, sentía como si una parte de él se estuviera muriendo, sentía como si su vida se estuviera yendo. Esperaba lo peor, pero no sabía si podía asimilarlo todo.
– Señor Kim – el doctor le hizo una reverencia – sobre Jungmin, puedo decir que solo fue un ataque de pánico así que no tardará en despertar – eso lo hizo sentir aliviado – sobre su otro hijo, me temo que entró en coma – ahora todo su alivio se había ido a la basura – vera al romper el lazo, me temo que su hijo no fue tan fuerte, al atentar con su vida hizo que el humano rechazará con todas sus fuerzas al lobo, haciendo que se apagará, lo que implica que tanto dolor lo llevo al coma.
– ¿Puede despertar? – el doctor se quedó callado unos cuantos minutos – ¿Doctor?
– Haremos lo que esté en nuestras manos, pero señor Kim – lo miro de una manera indescriptible – lo mejor para su hijo, es desconectarlo, su lobo sufrio tanto que no le pongo una semana para que muera, haciendo que el humano se desconecte y no tenga posibilidad de despertar.
Jimin ya no sabía que sentir, recordando ese momento donde entro al orfanato, buscando a algún lindo cachorrito, dónde encontró a Juno llorando en una esquina, en ese momento supo que ese lindo bebé seria su hijo, también recordó la vez donde Jungmin gateo hasta el en ese supermercado, para luego prenderse de su pezon.
Sus dos lindos cachorros, sus lindos bebés, ya no sabía que hacer, no sabía cómo hacer para que sus hijos dejarán de sentir tanto dolor.No sabía cuánto tiempo habia pasado, hasta que vio a los dos socios de Namjoon entrar muy preocupados al hospital, sabían el porque estaban ahí, estaban ahí por Jungmin.
– Señor Kim – los dos enigmas le hicieron una reverencia, este la respondió – ¿Cómo está nues– el chico no alcanzo a terminar la frase porque el otro le había dado un codazo.
– ¿Cómo está Jungmin?
Él lo sabía, Jimin lo sabía, sabía que esos dos enigmas eran los destinados de su hijo, lo sabía perfectamente, pero ¿Cómo era posible? ¿Cómo aquellas criaturas podrían ver a su hijo como una futura pareja? Nada tenía sentido, todo estaba revuelto en su cabeza y su corazón se sentía más que destrozado.
Lo único que pudo hacer fue guiarlos a la habitación en la que estaba Jungmin, no podía hacer más, ya estaba perdiendo a uno de sus hijos para que por otra estupidez perdiera al otro. Solo se alejo cuando vio a los dos enigmas entrar a la habitación de su hijo mayor.San se veía triste, sabía el porque su pequeño alfa estaba en esa cama, lo había sentido esa noche cuando estaba en un proyecto importante. Por otro lado Changkyun estaba enojado, quería acabará con el mundo para que su pequeño cachorrito no sufriera tanto, el podía soportar el dolor, era un maldito enigma, pero Jungmin, Jungmin era un niño cargando con tanto peso.
Solo se acercó al alfa para besar su frente con cariño.– Ya no se que hacer – San solo lo miro – no se que hacer para que deje de sufrir.
– Podemos acabar con todo lo que le causa dolor, podemos intentar hacer que esos malditos alfas dejen de abusar de él – de acercó a su amigo – pero no podemos intervenir en cosas familiares, nuestro lindo alfita se siente culpable por no proteger a su hermano, lo sentí, sentí todo su dolor y eso me preocupo, por eso te llamé.
– ¿Por qué no sentí nada? – ahora se veía confundido – ¿Por qué no pude sentirlo?
– Changkyun – San se acercó – yo no puedo oírlo cuando su lobo pide ayuda, eso lo haces tu – este asintió – yo siento su dolor y tú sientes el llamado de su lobo, recuerda que somos dos enigmas compartiendo a un alfa.
Este solo asintió, recostandose al lado de la camilla, soltando sus feromonas, pero cuando San soltó las suyas fue que el cuerpo de Jungmin decidió reaccionar, abrazando a San buscando la glándula de sus feromonas, haciéndolo sentir seguro. Mientras que Changkyun se aferraba a su cintura para besar su cabeza.
– Te vamos a proteger cueste lo que cueste mi lindo cachorrito, te lo prometo – susurro Changkyun.
– Te lo prometemos – lo corrigió San.
Pero ambos no se dieron cuenta que detrás de aquella puerta, se encontraba Haerin ya lista con un plan para acabar con esos enigmas.
– Si no eres mío Jungmin – miraba aquella escena – no serás de nadie – saco el ácido que tenía en su bolsillo – veremos si esos enigmas te siguen queriendo si quedas ciego.
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House Of Cards
FanfictionDespués de crecer se dieron cuenta que la vida no era fácil, que todo lo que leyeron de niños era una completa mentira, que las relaciones no eran como las pintaban en las películas y que a veces sus padres no los iban a entender en algunas cosas. P...