capitulo doce
promesas
125 d.c
Entonces te das cuenta que no es quien te mueve el piso, sino quien te centra. No es quien te robe el corazon, sino quien te hace sentir que lo tienes de vuelta.
—Mario Benedetti
LAS PRIMERAS LUCES DEL SOL se filtraron por su ventana desde el primer momento, las cortinas estaban entreabiertas, luego de haber llegado anoche ebria, decidió dormir con el aire fresco circulando su habitación. Sus manos buscaron con impaciencia las sabanas para cubrir su cuerpo con urgencia en cuanto sintió el frio colarse por su cuerpo y una mueca se dibujo en su rostro al tragar saliva y sentir un ardor en su garganta que la hizo dar un salto en su cama, levantándose sin pensarlo.
Se miró al espejo como acto siguiente, notando que sus mejillas adquirieron un color rosado y su nariz también. Suspiró con frustración dándose cuenta que había cogido un resfriado por se tan tonta de dormir con las ventanas abiertas en pleno invierno.
No perdió un segundo más y a pasos flojos pidió a las damas que le prepararan un baño caliente, esperando que al menos eso le sirviera para aliviar sus síntomas. Aunque no tenía la menor idea de como, ya que nunca le habia pasado esto antes. En desembarco lo máximo que hacía en invierno eran las brisas frías pero nunca como para tomar un resfriado. Su cuerpo se sentía cansado debido a las cantidades de vino que bebió en la cena la otra noche y lo último que deseaba era hacer un esfuerzo físico, pero para su desgracia, hoy partían hacia el muro. Fue algo que le dijo Lord Cregan a última hora al despedirse a lo cual no se pudo negar, solo visitas una vez el muro que divide a las tierras de los siete reinos de las tierras salvajes.
Le fascinaba escuchar cuando su abuelo le contaba sobre la vez la reina Alysanne Targaryen intento hacer que Ala de plata cruzara el muro para ver que habia mas alla de las tierras salvajes, pero a pesar de intentarlo tres veces, la dragona desobedeció negándose a cruzar. Lo cual despertó su curiosidad sobre que era lo que habia mas alla del muro.
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→ 𝐁𝐎𝐑𝐍 𝐓𝐎 𝐃𝐈𝐄 | house of the dragon
Ficción históricaLocura y grandeza son dos caras de la misma moneda y se dice que cada vez que un Targaryen nace, los dioses lanzan la moneda al aire y el mundo aguanta la respiración para ver de qué lado caerá. Visenya Targaryen, la hija "bastarda" de Rhaenyra La...