Espejo de Obsidiana

El puente

                                                                         Mactzil

-¡Buenas!-Llamo Santiago para ver si había alguien. En cuestion de segundos una chica como de mi edad salio del fondo, traia puesto un bonito huipil rosa y una falda de corte azul, su pelo negro lo traia en una cola, sonrio con cortesia resaltando las pecas de su mejilla.

-¡Buenas!, ¿en que les puedo ayudar?

- ¿tienen helados ?-preguntó Santiago.

-si por aquí- la muchacha guía Santiago a una heladera. Santi la siguió y se puso a agarrar cuanto helado pudiera.

Mientras exploraba la tienda, me desvié hacia un rincón lleno de artesanías exquisitas, donde brillaban telas coloridas y se exhiben máscaras de animales colgando de las paredes. Sentí algo de fascinación al ver las máscaras por un momento me imaginé llevando una tal vez compre una para las fiestas de septiembre. Regresé al lado donde están las chucherías, tomé algunos dulces y papalinas. Mientras tanto, Kiara olfateaba curiosamente algo en unos cajones cercanos.

-Huele bien- dijo Kiara.

Por curiosidad también me acerqué, pude sentir el olor a hierbas naturales lo que fue un deleite para mi nariz luego de haber pasado por qué quedó del maizal, la muchacha al ver mi interés se acerco a mi.

-también tenemos hierbas y especias - abrió los cajones mostrándome lo que había en cada una a ver en que captaba mi interés - tenemos manzanilla, cilantro, tomillo y demás, ¿te interesa llevar algo?

-¿eso es ajenjo?- pregunté apuntando al cajón que antes kiara veía, la muchacha asintió- deme un poco

Cuando terminamos de tomar lo que queríamos nos fuimos a la caja registradora.

-¿y cómo se llaman?- preguntó la muchacha casualmente mientras sacaba las cuentas.

-soy Mactzil y este es mi hermano menor Santiago

-pero usted puede decirme papi- dijo santiago guiñandole el ojo, le di un sape en respuesta por su comportamiento y el se quejo en contraste.

La chica rio.

-tan chiquito y ya todo un pícaro- dijo bromeando- bueno yo me llamo Rebeca

-es medio hermano -dije aun dándole malas miradas a Santiago para que se comportara, Santiago me saco la lengua - es un gusto Rebeca.

-Debí suponerlo, ¡sin ofender!- dijo con algo de pena.

-lo se, para nada nos parecemos- dijo Santi- pero no necesitamos sangre para ser hermanos-dijo abrazándome aunque tambien lo decia deplano para apaciguarme. Rebeca nos miró con cierta ternura.

-¿y son de aquí u otro lado?.

-Somos de Petén. Vivíamos en Flores pero nos mudamos apenas ayer - explique.

-Ah que genial, tal vez los meten a la misma escuela que yo- dijo mientras metía nuestras cosas en una bolsa.

-¿a cuál vas ?-pregunte.

-al colegio Nebaj el Quiché, tiene primaria y secundaria, iré a tercero básico el siguiente año- dijo con algo de emoción en su voz

-Yo estaré en quinto- dijo Santiago.

-¡Yo también estaré en tercero!, y creo que iremos a ese colegio, debo preguntarle a mis papas.

-espero vayamos al mismo- dijo Rebeca, luego miró los números en la caja-bien serán 150

Le di una mirada acusatoria a Santiago, él fue el que tomó más cosas, Santiago me sonrió nerviosamente dándome una mirada de cachorro, suspire pesadamente, adiós a todo mi dinero.