𝑪𝒐𝒏𝒇𝒖𝒔𝒊𝒏𝒈 𝑶𝒍𝒅𝒆𝒓 𝑳𝒖𝒗; 𝑯𝑶𝑶𝑵𝑲𝑰.

011

— Entonces... Si vas a ir tienes siempre que dar una buena impresión y vestir bien.

Sunoo se levantó de la cama mientras negaba con la cabeza al ver a su amigo castaño dormir plácidamente como si no tuviera que encontrarse con Heeseung en unas horas.

— ¡Ni-ki, despierta ya!

El nombrado apenas se removió entre las cómodas y calentitas sábanas y abrió sus ojos poco a poco tratando de acostumbrarse a la repentina claridad en la habitación.

— Mgh hyung, está muy temprano.

— No es temprano, vamos, tienes que levantarte. — el rubio se cruzó de brazos.

A regañadientes, Ni-ki se levantó de su cama, miró la cara del contrario y soltó una risa.

—¿Qué?

Ni-ki negó.

— Estoy cansado de anoche, dormimos muy tarde y nos levantamos tan temprano.

Sunoo tomó las manos de Ni-ki y lo miró con comprensión.

— ¡Ve a ducharte! — el mayor jaló a Ni-ki a la par que le hacía cosquillas sobre la cintura del menor.

El castaño como respuesta debido a la repentina acción, posó sus brazos al rededor del cuello de Sunoo con intención de alejarlo. Pasaron unos minutos así, ya era costumbre.

—Está bien h-hyung, ya iré. — Ni-ki se alejó del rubio bajo su seria mirada y entró al baño para hacer sus necesidades.

Sunoo hizo lo mismo pero en el baño de la planta baja, podía sorprender a su menor entrando al baño donde se encontraba y ducharse juntos, después de todo ellos eran amigos ¿no? O así lo pensaba Sunoo. Pero decidió no hacerlo debido a la timidez de Ni-ki, no quería volver las cosas incómodas.

Al terminar de ducharse y cambiarse Sunoo subió al cuarto del castaño con la intención de escojer su ropa. El rubio pensaba que la manera de vestir de Ni-ki era tierna: siempre utilizaba jeans holgados, camisas ajustadas, hoodies e incluso shorts, pero solo cuando estaba en casa. Todo era muy colorido y lindo pero Sunoo quería que el menor usara algo que impactara a Heeseung, para que se diera cuenta de lo bonito que era Ni-ki y la tan buena persona a la cual él había lastimado.

Al entrar a la recámara visualizó a Ni-ki sentado en la cama todavía con la toalla de baño puesta.

— Ya estoy hyung, ahora que tengo...

— Veamos qué tenemos por acá. — Sunoo se acercó al armario y empezó a registrar todo, buscando una buena opción de outfit para el castaño.

Ni-ki comenzó a reír al ver a su mejor amigo de acá para allá, balbuceando cosas que él no podía entender y dándole caras divertidas al ver prendas que consideraba no tan bonitas.

— Oh que cosa tan ridícula. — dijo, señalando una camisa con estampado de serpiente. — ¿te pusiste esto alguna vez?

— Nunca me lo probé, pero al momento el estampado me pareció peculiar. — respondió.

Sunoo hizo una mueca de alivio y siguió buscando. Pasaron uos cuántos minutos y pensó que había elegido la ropa correcta, considerando el tono de piel, el color de cabello y la figura de el castaño.

— Tienes tanta ropa linda, Ki. Pruébate esto. —le extendió la ropa seleccionada la cual el castaño no inspeccionó correctamente, por lo que le dió una mirada de desconfianza a su amigo, pero en el fondo sabía que Sunoo siempre hacía un buen trabajo cuando se trataba de la ropa, estilo y verse bien.

El castaño entró al baño para medirse la ropa, al terminar salió del lugar bajo la mirada impresionada y orgullosa de Sunoo.

— Ni-ki luces muy bonito. — el contrario se acercó para abrazar a Ni-ki con una sonrisa. — Agradezco tanto haberte conocido, ¡mi mejor amigo es tan lindo! — Sunoo tomó las manos de Riki y empezaron a saltar y sentirse feliz sin razón. Simplemente feliz de tenerse el uno al otro.