𝟎𝟓

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Sus miradas conectaron de una forma inexplicable, transmitían lo que era imposible describir, sus alientos cada vez se mezclaban más, teniendo la necesidad de volverse uno, miles de sensaciones se apoderaron de sus mentes y sus cuerpos, comenzaban a agobiarse y a desesperarse, no tenían ni idea que hacer después de las palabras de Enzo. 

Se quedaron unos segundos mirándose, aunque para ellos fue una eternidad.

-Por la mierda Matías.- Soltó de repente Enzo, alejándose bruscamente del contrario, le dio la espalda mientras pasaba sus manos por su rostro de forma molesta. Matías solo se quedo quieto en su lugar, sin mover ni un solo musculo, confundido por la repentina reacción de Enzo.

No tenia ni idea lo que estaba sucediendo.

Ni lo que sucedía en su corazón. 

Matías solo se quedo observándolo sorprendido, sin saber que hacer ni decir, Enzo por unos momentos quedo mirando a Matías como si quisiera que dijera algo por la situación.

-Matías..-

No paso.

-Matías..-

-Que?- Contesto, esta vez con la mirada en el suelo.

Enzo al ver que Matías no lo miraba se le acerco otra vez, tomando su mentón.

-Mírame chiquito...- Le hablo con voz suave, como si pensara que hablándole fuerte lo asustaría.

Matías lo miro, sentía que estaba rojo, con la polera mojada, temblando leve, con el corazón apunto de salir de su pecho, intentando disimular las ganas de abalanzarse contra Enzo y besarlo.

Espera que?

Que estaba pensando? 

-Deja de jugar conmigo Enzo..- hablo suave, de forma suplicante, queriendo que sus ganas de hacer algo se esfumaran, queriendo que las inmensas ganas que le tenia a Enzo se esfumaran, queriendo que sus ganas que ah estado reprimiendo durante meses se esfumaran.

Queriendo que los sentimientos que estaban creciendo hacia a Enzo se esfumaran.

-No que jugaríamos a lo que vos quisieras Mati?....- Le contesto, sonriendo de lado, recordándole a Matías el juego de palabras que estuvieron haciendo en todos los encuentros que habían tenido.

El semblante de Matías cambio de repente a uno molesto.

Había recordado porque lo odiaba tanto.

-Sos un hijo de puta..- le reprocho de forma lenta y fuerte, demostrándole lo molesto que estaba con el.

Se dio vuelta hacia el lavamanos, apartando la mano de Enzo que anteriormente estaba en su mentón, mojándose la cara para después tomar mas papel para poder secarse su rostro, observo por el espejo su polera, estaba toda manchada de café, volvió a fruncir el ceño, corrió la mirada de su polera a Enzo, que no paraba de mirarlo divertido.

Volvió a recordar porque se encontraban en el baño. 

-Sos un mismísimo hijo de puta, te lo eh dicho?- Recordó Matías.

-No llevo la cuenta.- contesto cruzándose de brazos.

-Pues te lo vuelvo a repetir, sos un hijo de puta, un forro, un chanta de mierda, un puto viejo choto- por cada insulto que soltaba, se acercaba mas a Enzo, cada vez se le veía mas molesto.

Enzo solo se quedo quieto en su lugar, se le veía que disfrutaba lo que estaba pasando, molestando aun mas a Matías.

Quería borrarle la sonrisa del rostro

Los días de la montaña. -𝐌𝐚𝐭𝐢𝐞𝐧𝐳𝐨-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora