Capítulo 104 "Dos Mundos"

192 19 4
                                    

Narra König...

Algunos meses pasaron, el embarazo de Luciana había avanzado, pero debía irme, a Austria se le ocurrió formar alianzas estratégicas con Brasil pero no podían ser muy obvios, asi que parece que no encontraron mejor opción que contratarme, no sé por que demonios dije que sí, bueno, si lo sé, hay mucho dinero de por medio y mi esposa y mi hijo lo necesitan ahora más que nunca.

Luciana va de vez en cuando a la base, Riley y Price han intervenido para que ella no se esfuerce, no cargue peso y se encuentre tranquila haciendo consultas médicas, atendiendo heridos y entrando a quirófano, me dijo que había extrañado eso.

Ahora me encuentro en un infierno de cemento conocido como las favelas, apoyando al cuerpo de élite BOPE para suprimir del mapa a una red de narcotráfico, pensé por alguna razón que tomaria menos tiempo, solo algunas semanas, pero los enfrentamientos se han prolongado.

Nikto ha despedazado a varios, los ha cortado por la mitad, les abre las costillas y clava los cadáveres en barras de metal como si fueran espantapájaros, ha mejorado, ya no habla tanto en tercera persona y parece más feroz y agresivo que antes.

Tenemos días atrincherados en unas viviendas improvisadas, hechas con láminas y concreto en el borde de un risco, hemos perdido a varios, pero por cada uno de nosotros, 40 de ellos caen.

Por las noches tomo en mis manos una fotografía de Luciana con Straciatella, ver su sonrisa resplandeciente, me mantiene cuerdo y con ganas de volver.

— ¿Cómo va el embarazo? — pregunta Hutch codeandome y guiñandome un ojo mientras nos encontramos pobremente alumbrados por un faro.

— Falta poco... — respondí sin dejar de ver la fotografía entre mis manos.

— ¿Niño o niña? — interroga Horangi acercándose al grupo.

— Niño... — informé.

— Felicidades nuevamente Coronel... — Horangi me daba unos cuantos espaldarazos secos.

Estamos agotados de combatir, por suerte los recursos no faltan, me ducho en 5 minutos, como en la mitad de tiempo y duermo con un ojo abierto y el otro cerrado unos 20 minutos, el resto de las 24 horas, combatimos fuego contra fuego.

Las fuerzas BOPE y otros cuerpos de operaciones especiales de Brasil, han cercado las zonas populares, evacuado a los habitantes y decretado toque de queda, la noches son calientes, solo la sangre hace que mi cuerpo se enfríe.

Durante el día ya me había cansado de tanto combatir y de tener reuniones con los que estaban al mano de los cuerpos en Brasil.

— Hoy nos iremos a casa... — sentencié harto de la situación.

Nos dividimos como había planificado, Dokkaebi rastreaba la ubicación del enemigo, había dado resultado el sangriento interrogatorio que Nikto y yo habíamos realizado a los sujetos que habíamos capturado hace días, no duraron mucho tiempo pero fue suficiente para obtener información.

BOPE envía unidades caninas a rastrear y a despedazar lo que se encuentre, nunca había hecho tanto uso del rifle francotirador cómo ahora, y es satisfactorio.

Veía como los narcos se escondían, dan la pelea, ha sido rudo, y tuve que dejar mi posición de francotirador en las alturas para bajar y asistir a Krueger que había sacado un último recurso, una ametralladora.

— Nos están rodeando Coronel... — informa Dokkaebi a través del intercomunicador.

— A la mierda con esto. — exclamé acercándome a Krueger que se preparaba para ejecutar la ametralladora.

Mein Schatz König (SAGA COD #1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora