𝗠𝗔𝗡𝗜𝗔𝗖 | 𝐶𝑖𝑛𝑐𝑜 𝐻𝑎𝑟𝑔𝑟𝑒𝑒𝑣𝑒𝑠 ☕︎

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𝑇ℎ𝑒𝑟𝑒'𝑠 𝑑𝑜𝑒𝑠𝑛'𝑡 𝑠𝑒𝑒𝑚 𝑡𝑜 𝑏𝑒 𝑎𝑛𝑦𝑜𝑛𝑒 𝑎𝑟𝑜𝑢𝑛𝑑

Clarity/Ocho
A Vanya le gusta Cinco

A Vanya le gusta Cinco

A Vanya le gusta Cinco

Debo admitir que he pasado tiempo con él, a pesar de ser una semana, y de la pesadilla que tuve que me hizo llorar, le estoy tomando cariño.

O algo más que cariño.

Ni siquiera se que es lo que siento respecto a él, pero es mejor que antes.

Termino de arreglar mi cabello y me visto, salgo del baño rumbo a la habitación y lo veo acostado boca arriba.

—¿Entonces que harás?

Se percata de mi presencia y me mira —Decirle que no siento nada por ella, y que mejor dejemos la "amistad" hasta aquí. No quiero problemas.

—Me parece perfecto.

—¿Ya no estas molestas?

—No, la decisión que tomaste es perfecta.

Me mira y me mira, basta, me pongo nerviosa e incómoda. Sus ojos verdes siempre me han hecho apartarle la mirada.

—¿Ocurre otra cosa?

—No...nada, solo veo que lograste quitar la sangre de tu cabello.

—Eh... si, solo con agua —Me rio un poco— ¿Esta todo bien?

—Si, iré a hablar con ella.

Se va y aprovecho para agarrar una mermelada y vaciar todo el envase en cuestión de minutos. Es lo más delicioso del mundo.

Cinco
Tengo las manos cerradas en puños, no puedo delatarme frente a Clarity o todo se ira al carajo, pero tampoco puedo evitar verla todo el tiempo. Ahora que hemos pasado mas tiempo juntos, mi admiración y amor por ella han crecido muchísimo. A pesar de que ha estado tan débil y sus poderes están inestables, ella sigue con sus entrenamientos y no se da por vencida.

Recuerdo la pesadilla de la otra noche, me sentí tan mal y débil por meterle esas cosas a la cabeza, no lo merece, era mejor que me dejara sufriendo a mí. También ha estado vulnerable y se siente sola, todos le dieron la espalda cuando Ben murió, cuando subí ese día y la vi llorando por primera vez en mi vida, me destruyo completamente y por eso corrí a abrazarla.

Clarity es increíble, y se merece todo lo bueno.

Voy con todos pensamientos revueltos en la cabeza a la habitación de Vanya. La veo escribiendo unas partituras mientras sostiene su violín con otra mano. Se percata de mi presencia y me mira.

—¿Podemos hablar?

—No sé sobre que —Responde tajante.

—No te molestes conmigo, no estoy en la obligación de corresponderte.

Si soy más indiferente será mejor, ¿no?

Se ríe sarcásticamente y se levanta dejando el violín sobre el escritorio —De verdad espero que no necesites de mi en un futuro, porque no volveré a ayudarte. Y suerte con ella, todos aquí la odiamos, ya sabes que ocurrirá contigo.

Me molesta lo que dice, como si el sentimiento no fuera mutuo ya.

—¿Crees que no lo sé?, no me interesa lo que ustedes sientan o piensen por mi. Lo que sea que pase, jamás la dejaré sola. Y tampoco necesito de tu ayuda, no seas tan arrogante, ese es mi trabajo.