La tension en el aire era palpable. Ambos adultos estaban desesperados. El sudor goteaba incesantemente por sus cuerpos. Bandit no saben qué pensar o qué hacer. Wendy no lograba razonar con claridad. Ni siquiera podía respirar. Todo estaba tan confuso.Con los ojos bien abiertos, los dos miraban hacia la puerta de la habitación. Bluey estaba hablando, su voz zumbando de fondo. Los ojos de ambos se abrieron aún más cuando se dieron cuenta de que la pequeña estaba intentando abrir la puerta.
Rápidamente el Heeler azul corrió y se apoyó con fuerza a la puerta, impidiendo cualquier tipo de ingreso.
—“¡Papá! ¿Qué pasa?”, preguntó la pequeña, preocupada ante el estruendo.
—“¡Bluey! ¡Es que…!”, respondió él, claramente nervioso. “¡Acabo de salir de la ducha!”
Bluey enarcó una ceja. “¿Te duchaste a la mañana?”
—“¡Sí!”, vociferó, intentando parecer tranquilo. “Es… algo… ¡Algo nuevo que estoy probando para mantenerme despierto!”
—“Oh… Y ¿Funciona?”
—“Ah… No lo sé. Apenas acabo de probarlo, pero… Aún no he terminado y no estoy listo para salir”
—“Está bien, pero ¿Qué pasará con mamá?”
—“Atiéndela y habla con ella. Yo iré en un momento”, ordenó, inquieto.
—“¡Claro! Lo haré”
Bandit suspiró aliviado una vez que escuchó los pasos de su hija alejarse por completo.
—“Bien hecho, y ¿Ahora?”, cuestionó Wendy.
—“Escucha, este es el plan…”, pronunció mientras se dirigía a ella. “Yo las distraeré para que puedas salir de la casa sin que te vean”.
—“¿Qué?”, soltó, extrañada.
—“Confía en mí, no tardaré mucho”.
—“Ahá, y ¿Luego qué?”, volvió a cuestionar, esta vez algo molesta.
—“¡No lo sé!”, exclamó, sin gritar. “Te llamaré o algo”
Wendy se cruzó de brazos. “¿Me invitas a pasar la noche en tu casa y quieres echarme a la calle luego de estar en tu cama?”
—“¿Qué?”, soltó, confuso.
—“¿Acaso tienes miedo de que nos vean juntos?”, frunció el ceño.
Bandit hizo un facepalm y luego se frotó la cara. “Wendy, en primera, claro que te invité a pasar la noche; segundo, ni tú ni yo sabemos cómo terminamos aquí; tercero, entiende que esta situación es demasiado complicada para explicar. ¿Qué le voy a decir a las niñas? ¿Qué dormimos juntos? Y ¿Qué pasará si le dicen algo a Chilli? ¿Cómo lo tomará ella?”
Wendy no respondió, solo se le quedó mirando juzgadoramente.
—“Wendy…”
Ella no volvió responder. Miró a otro lado.
—“Escucha, solo haz lo que te digo…”, pidió, agachándose hacia el borde la cama. “Al menos por ahora”, intentó razonar. “O hasta que descubramos lo que pasó. Pero por favor, no me hagas esto”
La chow-chow se mostraba algo disgustada por la conducta de su vecino. Era extraño. El no poder recordar lo que ocurrió, acabar en la cama del Heeler azul y el que la hija de éste casi los descubre, realmente le preocupaba, pero ¿Por qué parecía molestarse ante la actitud de él de sacarla de la casa y querer ocultarla? Ella no parecía tener intenciones de cooperar y hasta seguía negándose, evitando dirigirle la mirada. Él, sin embargo, le tomó su mano por momento, disculpándose de lo ocurrido. Ella lo miró y vio su rostro arrepentido y angustiante. Reflexionó para sí misma.
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"Una rosa es una rosa" (Bandit X Wendy) (Bluey AU)
RomanceLa vida de Bandit Heeler era casi perfecta, hasta que una sucesión de eventos hace despertar algo entre el y su vecina Wendy. Esta creciente mutua atracción podría causar estragos en sus vidas.