OUT OF TIME | lixjin

Capítulo 26

ADVERTENCIA: Este capítulo incluye escenas con contenido fuerte y delicado.

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Hyoyeon todos los días se encargaba de dejarle una pizca de veneno para ratas en las comidas y bebidas de Hwang Wonwoo ya que, al ser la omega encargada de las tareas de la casa, nadie le discutirá aquello.

Todos los días durante dos años.

Aquello se hizo eterno, ver como su marido de a poco iba perdiendo su fuerza para caminar, sus sentidos neurológicos y, a lo último, su capacidad para moverse, además de eso tener que atenderlo, bañarlo y darle de comer como si de un bebe se tratase, le hacia creer que no se iba a liberar nunca.

Más allá de que no pudiera moverse del todo, esto no impedía que le siguiera tratando mal al punto de imponerse con su voz alfa o de tirarle con objetos aun desde su silla de ruedas mientras transcurrían los primeros meses de aquel envenenamiento.

Hyoyeon se encontraba preparando la cena mientras recogía su cabello ya que su alfa miles de veces le hizo saber que el hecho de que se le caiga uno en la comida era completamente asqueroso, arreglaba su camisa prendida hasta el cuello y sus polleras largas que Hwang Wonwoo le obligaba a usar, decide extender una de sus manos para alcanzar aquella caja con el contenido mortífero que había estado usando hace años.

Pero antes de atender a su alfa, decidió por llevarle un plato de comida a su hijo Hyunjin, subiendo las escaleras de aquella casa característicamente de una familia de clase media. Al llegar a su puerta le da tres toques y desde adentro su hijo le dice que puede pasar

Al abrir se encontró con Hyunjin dibujando en un pequeño escritorio que tenía, eran las nueve de la noche y aún seguía despierto.

— ¿Mami, qué ocurre? — preguntó él, deteniendo su movimiento de lápiz a lo que ella entra a su habitación sonriendo.

— Cariño, pensé que ya estabas dormido — agregó ella, apoyando el plato de bibimbap en su escritorio.

Hyunjin resopló luego de agradecerle por la comida, haciendo que su flequillo se desordene.

— Es que no puedo dormir sin bañarme, mamá — contestó haciendo un mohín de disgusto — Me siento muy sucio.

Su madre lanzó una risa nerviosa.

— Sabes que no puedes bañarte cuando tu padre aún está despierto, es que puede tener náuseas y... y debería ir corriendo al baño, como ha ocurrido en estos meses.

Hyunjin tomó los palillos y siguió comiendo.

— Mamá — habló él y Hyoyeon lo miró — Uhm... ¿papá se pondrá bien? — preguntó en un balbuceo.

Ella no tenía ganas de responderle lo que realmente quería, sino lo que en verdad tenía que decir para que su hijo ni nadie sospeche nada.

— Claro que sí, hijo — espetó rápidamente —. Con los remedios que le estoy dando seguramente se recuperará pronto — continuó mientras le acariciaba el cabello.

— ¿Y tú quieres que se recupere? — preguntó él, con una mirada totalmente inocente y alejada de todo lo que significaba su padre.