Capitulo 20: Cita de media Luna (3)

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El examen Chunin había terminado.

Pasaron muchas cosas que nadie se esperaba. La paliza que Naruto le dio a Kiba, la pérdida del control de Sasuke, la brutal pelea entre Gaara y Lee, la nada emocionante pelea entre Sakura e Ino y sobre todo el enfrentamiento entre Neji e Hinata.

Naruto lo sintió, casi pierde el control.

El solo hecho de ver a Hinata siendo golpeada casi unilateralmente era desgarrador para el. Él estaba enojado, muy enojado. Ira, era lo que sentía incluso más que aquella vez que pensó que Sasuke moriría por protegerlo.

Si no hubiese sido por ese sello que aquel hombre le había puesto el seguramente hubiera pedido el control no tenía duda, una parte muy pequeña dentro de él hubiera preferido eso a ver a Hinata en ese estado.

Fue sorprendente para todos como el, Naruto. No se despegó de su lado en todo momento. Ahora varios días después él se encontraba en el hospital, a su lado inconsciente en una cama blanca estaba Hinata.

Ella no había abierto los ojos desde entonces.

Mirándola Naruto no pudo evitar recordar sus palabras, todo lo que le había dicho a la otra Hinata. La muerte de su madre, la mala relación con su familia...

Había pasado por su cabeza antes, el hecho de que cierta manera Hinata también estaba sola. Él no podía creerlo ¿Como las familia podía hacerse daño?

—"Estas aquí otra vez...".

Entrando por la puerta Kurenai lo saludo. Ante su saludo Naruto asintió sin dejar de ver a Hinata.

—"Dame eso, hay que ponerlo en agua para que no mueran".

—"Pero... quiero dáselo cuando despierte". Naruto explicó, alternó su mirada entre el ramo de flores en sus manos y la inconsciente Hinata.

—"Los médicos dijeron que tardaría al menos una semana antes de que despierte". Kurenai sonrió levemente mientras extendía sus manos. —"Dámelas, le dire que es de parte tuya cuando despierte".

—"....".

Después de unos segundos Naruto se las entregó.

Kurenai rápidamente las colocó dentro de un jarrón que había preparado, luego colocó el jarrón junto a los demás jarrones con flores que él había traído.

—"Deberías ir a entrenar". Kurenai dijo de repente.

—"Yo ganaré". Naruto susurro.

—"Eso espero, créeme. Pero si no mejoras dudo que le puedas ganar".

En respuesta Naruto apretó sus puños y frunció levemente el ceño con evidente frustración.

—"Lo destrozare... Lo juro".

Después de decir esto Naruto salió por la puerta. Él tenía la esperanza de que Hinata despertara antes de que comenzara su entrenamiento, por eso lo había pospuesto por varios días.

Pero el sabio pervertido le dijo que no podía posponerlo mas, dentro de menos de un mes él se enfrentaría a Neji, el responsable del estado crítico de Hinata.

Él ya lo había jurado, juro con la sangre de la chica en sus manos que lo destrozaría.

Esos sentimientos de ira he importancia que sentía pensó que lo había dejado de lado hace mucho tiempo. En el paso hubo ocaciones en la que se sentía así, resentido con el mundo pero esta vez era diferente. No era por el, era por otra persona una persona que gustaba de él por alguna razón.

Realmente no sabía se sentía de esa manera por que estaba consiente de sus sentimientos o era porque le recordaba a la otra Hinata.  Una vez fuera del hospital Naruto se obligó a relajarse, sus músculos se relajaron al igual que la expresión en su rostro pronto sonrió como de costumbre.

El Ninja que conocíDonde viven las historias. Descúbrelo ahora