Capítulo 14

21 0 0
                                    



Me quedo sin respirar por unos segundos.

Él me había estado llamando, y me ha escrito cuando pensé que olvidaría lo que pasó entre nosotros esta noche.
Y entonces empiezo a recordar cerrando los ojos, ese momento donde él se aferraba a mi cuerpo con intensidad y yo a la de él. Y sus labios. Sus carnosos y suaves labios que se juntaron con los míos. El sabor de sus besos iba más allá de lo celestial. Su manera de aferrarse a mi cintura. Esa electricidad que corría entre los dos. Fue algo mágico, algo único.

El sonido de mi celular me despierta de mis pensamientos y entonces recuerdo que todavía no he respondido su mensaje, había visto que estaba en línea, y me ha vuelto a escribir:
*Lu, al fin te conectas. Perdona mi insistencia. Solo quería saber si estás bien.

*Hola, si. Estoy bien. Gracias por preguntar. Perdón por no haberte atendido. Me había quedado dormida.- le escribo y espero ansiosa que me responda.

*No te preocupes. Debí suponerlo. Estás libre esta noche? - pregunta y mi corazón empieza a acelerarse con solo pensar que podría verlo esta noche. Pero luego recuerdo que a Lara no le gustaría la idea de verme con él. No es lo correcto, pienso.

* Hmm. Thiago, creo que no es buena idea.- envío y me angustia pensar que podría verle pero estoy eligiendo no hacerlo.

* Por favor, Lu. Solo te pido unos minutos, una hora como máximo. Lara no tiene por qué saberlo.

* Pero no estaría bien. Eres el jefe de mi hermana, no es lo correcto.

* Solo necesito verte unos minutos, no pido más. Sé que lo de anoche no fue solo para una vez y tú lo sabes también. Lo sentiste.

*Está bien. Solo unos minutos.- estoy segura que esos minutos serán nada cuando esté cerca de él, sé que moriré cuando lo vea. Pero es todo lo que deberíamos. Le diré que esto no puede ir más allá, ya que traerá muchos problemas para ambos. Ojalá me crea a mí misma lo que estoy diciendo.

* Haré que esos minutos valgan la pena. Te recogeré a las ocho.

*Te esperaré.

Pasaron las horas, y con cada hora mi ansiedad aumentaba más. Eran las cinco de la tarde y yo todavía no encontraba que ponerme, ni siquiera sabía que tenía planeado él. Y eso me ponía más ansiosa aún.
Le había dicho a mis papás que iba a salir con Kari y unos amigos más, y que no tardaría.
Me siento mal por mentirles pero no me queda de otra, cuando sé que a los dos le disgustaría la idea de que salga a cenar con el JEFE de mi hermana. Algo medio raro, no?

En fin, entre pruebas y pruebas de ropa me decidí por una pollera negra de cintura al vuelo, que cubría la mitad de mis muslos. Un zapato con punta fina de color negro, y una blusa con encaje y tiritas, un poco escotada pero no demasiado. Mi pelo ondulado lo dejé suelto, tal como me gusta. Un poco de mascara para pestañas, rubor, un brillo labial de un rosa pálido, y ya estaba lista a las 7:45.
Lista? Lista con la ropa, porque emocionalmente estaba totalmente alterada. Sentía adrenalina, como si estuviese a punto de hacer algo prohibido, lo cual era así por cierto. Sentía ansiedad, sentía que mi corazón latía demasiado fuerte y rápido. Sentía mis nervios a flor de piel. Y cuando sonó mi celular.

* Lu, estoy afuera. - AAAA!! Grité de la emoción en mi dormitorio y bajé intentando aparentar estar lo más calmada posible para que mis papás no sospechasen nada.

Me despedí de ellos y salí a la acera. Donde una LandCruiser negra del año estaba estacionada frente a mis ojos. Bajó el chofer y me abrió la puerta de atrás.
Al subirme me encontré con esos ojos azules. Con esa intensa mirada que me penetraba por dentro y esa perfecta sonrisa que hacía mi corazón derretirse.
- Buenas noches, Lu.- dice con esa voz ronca agarrando mi mando y dandole un beso. Notando en el ambiente esa electricidad emitida al sentir el contacto con su labio con mi mano.
- Buenas noches, Thiago.- digo de la manera más sensata posible, sintiendo su mano agarrando la mía.

-Estás hermosa esta noche.- me dice y yo no logro articular palabra, consiguiendo solamente sonreír ante el gesto con un color rosa en mis mejillas más oscuros que el rubor que le había puesto.

- Dónde vamos?.- pregunto cuando consigo hablar. Notando que en ningún momento ha soltado mi mano, por lo cual estoy muy agradecida.
- Ya verás Lu. Es una pequeña sorpresa.- dice y yo solo sé que hasta ahora todo con él ha sido inesperado. Y mientras esté a su lado seguirá siendo así.

Este intenso amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora