Chainsaw Man [ Ratones de Ciudad ]

T2. Capítulo 4.- Festival Confuso

Sobre las suaves telas de las sábanas de un hotel, tendidas con delicadeza encima de la cama pegada a la pared que daba a la vista exterior a través de una ventana ubicada de manera muy conveniente se encontraba un, tal vez demasiado pensativo, chico de alborotados cabellos rubios.

El joven hacia un curioso gesto mordiendo su propio dedo índice al punto de provocarse un leve dolor agudo de pocos segundo antes de soltarlo. Pero pese a su expresión de concentración, aun no conseguía llegar a una idea concreta.

- A ver, a ver... ¿Será qué eso que dijo significa algo? - Se preguntaba Denji, el recuerdo de las recientes palabras de la noche anterior soltadas por Mami, su amiga igualmente rubia, le quitaba el sueño más de lo que admitiría. - No. No. ¿Pero qué estoy pensando? ¡Ella no sabe que el Chainsaw Man soy yo! ¿Pero y sí...? ¡Agh! ¡Que difícil es! ...Tal vez una leve "frotada" me ayude a pensar más claro... - Se dijo dirigiendo su atención a su propia entrepierna.

Acercó lentamente su mano, sudando en frío con la sensación de estar haciendo algo mal, pero al mismo tiempo con las ansias de darse un poco de placer carnal, cuando la puerta de la habitación abriéndose lo asustó más de lo que cualquier otro demonio podría haber hecho.

- ¡Aah! - Gritó exaltado al punto de caer de espaldas sobre la cama.

- ¿Denji? ¿Estás bien? - Preguntó Hirofumi viendo con un toque de preocupación a su amigo, pero en el fondo solo podía pensar en que se trataba de alguna tontería característica del rubio.

- Es-estoy bien... En serio. - Respondió desviando la mirada. - Además no te preocupes por mi a menos que te conviertas en una bella chica y pierdas la memoria. -

- ¿Eh? Eso es raro... Hasta para ti, urgido. - Denji estuvo por protestar el ser llamado de tal forma despectiva, pero el pelinegro lo interrumpió al mismo tiempo que desviaba su vista hacia el marco de la puerta. - Recogí a Nayuta de la habitación de las chicas. La deje abajo esperando, así que más vale te des prisa. -

- Ya voy, "papá". Ya voy. - Se levantó para colocarse el calzado, lo único que faltaba. - Cielos, que molesto. - Con dificultad comenzó a atarse los cordones.

- Denji... ¿No sabes como hacerlo? Creí que tal vez alguien te había enseñado... -

- ¡Si sé, ¿ok?! ¡Si sé! - Se quejó apenado. - Es solo que es un poco difícil porque estos cordones son pequeños y... ¿Qué haces? - Yoshida se había puesto se rodillas frente a el para sujetar su pie.

- Te enseñaré como atarte los cordones, porque esto... ¡Vaya! ¡Si qué está fatal! Ya se porque a Nayuta siempre se le sueltan los cordones, no sabe como atarlos bien. - Sin prestar más atención a las quejas de Denji, el joven Devil Hunter comenzó a dar vueltas a los cordones, similar a orejas, antes de rodearlo entre sí. - Y al final pasas una por debajo de otra; tiras con todas tus fuerzas y... ¡Woola! -

Al levantar la mirada, Yoshida se cruzó con los ojos de Denji juzgándolo hasta las profundidades de su ser.

- Eres tan raro... Solo espero no me pegues lo homosexual. -

- No soy homosexual, me gusta la vag... -

- Sí, sí. Lo que tu digas intento de Idol. - Lo interrumpió pasando por su lado para retirarse de la habitación en busca de Nayuta.

Hirofumi suspiró, a veces tratar a su amigo era complicado, pero no podía negar que su vida se había vuelto más divertida desde entonces.

- Ahora que me he calmado un poco no puedo evitar creer que fue una tontería pensar en que podría intentar algo con Mami. Yo quiero cien novias, no solo una... Pero ella es mi amiga, no quisiera lastimarla. - Pensó el chico caminando por los pasillos en busca del ascensor. Tras encontrarlo, se montó en este junto a su compañero de cabello negro. - ¿Desde cuándo soy tan considerado? Creo que luego de recibir a Nayuta, y en especial desde que me encontré con Kobeni mi forma de pensar ha cambiado mucho... No me molesta, pero a veces extraño las "pajas". -