El ave y el nido | Bospa

Capítulo 4

Para Bosco salir de su zona de confort ha sido demasiado difícil.

El tener que socializar pero tener miedo al que dirán de él.
El dejar sus miedos aún lado, el ser valiente y afrontar las cosas. Así ha sido su vida desde el fallecimiento de su madre.

Por cosas del destino conoció a este chico llamado Pedro Pablo que le parecía un chico agradable, pero no encontraba las palabras correctas para entablar una conversación con él, le daba pánico y este chico al parecer cada vez quería acercarse más a el.

Llegó la hora del descanso y Gala le había preguntado a su hermano si quería que le acompañara a lo que el respondió que no, necesitaba estar solo y tener un momento de paz así que fue detrás de las canchas y se sentó, se relajó y empezó a disfrutar del aire hasta que vió a lo lejos a Pedro Pablo.

- ¡Bosco! - dijo Pepa a lo lejos saludando con una sonrisa acercándose.

Bosco rió suavemente, era agradable.

- ¿Por qué tan solito?

- Quería estar solo - contestó tímidamente.

- Oh. Entiendo me retiro entonces no te quiero molestar - se dió la vuelta apunto de irse.

- No - dijo rápidamente, Pepa volteó y sonrió -. Quédate ya hemos hablado como unas tres veces, no pasa nada.

- Genial - sonrió mostrando sus dientes -. ¿Cómo estás?

Bosco tragó saliva al escuchar esa pregunta ¿Como estaba? Ni el mismo lo sabía.

- No lo sé - soltó una risa seca -. Creo que ni yo mismo sé.

- ¿Puedo preguntarte algo? - se atrevió a decir el chico de cabello largo con algo de miedo a la reacción del contrario.

- Sí.

- Ese día - se aclaró la garganta -, cuando te ví en el baño ¿que te ocurría?

Bosco se removió incómodo de su lugar.

- Perdón si te incomodé no era mi intención apenas nos conocemos y-

- Exacto, apenas nos conocemos y tú ya estás arruinando todo queriéndote meter en mi vida sabes que - se levantó y tomó su comida -. Creo que es mejor que me vaya.

- ¡No! Espera - dijo Pepa queriendo tomar su mano pero deteniéndose no quería invadir su espacio.

- Tú eres un completo desconocido para mí no tienes por que meterte en mis cosas - dijo tocándose el pecho con una mueca -.

- ¿Estás bien? - preguntó acercándose lentamente a el.

- Estaba bien hasta que tú veniste a recordarme algo que definitivamente no quería recordar - dicho esto se retiró del lugar.

Pepa se quedó pensativo. Lo había arruinado todo.

🍃🍃🍃

Después de otro pésimo día, Pepa llegó a su casa y no dejaba de pensar en ese chico. ¿Por que quería ayudarlo tanto? No lo entendía, pero desde la primera vez que lo vió sintió la necesidad de ayudarlo.

Por que el sabía perfectamente el sentimiento de sentirse solo en ocasiones y sentir que nadie te comprende. Tuvo que madurar desde temprana edad para cuidar a su familia cuando su padre los abandonó desde muy pequeños. Su más grande fortaleza era su madre, su hermano y su tía.

El se consideraba una ave, el quería volar y ser libre pero por otro lado una ave también tenía la responsabilidad de cuidar y proteger a su nido en este caso su familia.

Había aprendido que a veces la vida nos pone a prueba no para demostrar nuestras debilidades si no para descubrir nuestras fortalezas. El se mantenía fuerte por su familia, pero por otro lado también quería volar y ser libre como una ave aunque a veces no pudiera.

🍃🍃🍃

Bosco llegó con una mala cara a su casa y Gala inmediatamente lo notó y se acercó a él.

- ¿Que te sucede Bos? - preguntó Gala.

- Nada, solamente no entiendo como la gente puede ser tan patética queriéndose meter en la vida de los demás.

- ¿Quién? - frunció el ceño.

- Pedro Pablo ese el que conocí esta semana es un metiche - apretó su mandíbula.

- ¿Pero por que dices? - rió al no entender lo que pasaba.

- No sabes lo mucho que me costó el compartir otras palabras con alguien que no fueras tú, papá o Eder cuando sentía que ya iba mejorando la comunicación se atrevió a preguntarme sobre mi ansiedad - tocó su pecho.

- Pero quizá no lo hizo con mala intención Bos, el se ve buena onda y quizá lo único que quiere ese ayudarte ¿no crees?

Bosco se quedó pensativo, no sabía que pensar lo único que estaba seguro es que no quería seguir hablando con ese chico.

- No, me faltó al respeto y eso no lo voy a permitir. ¿Cómo va a preguntarme algo tan íntimo?

- Hermano no toda la gente es mala, debes de darte la oportunidad de conocer más a ese chico, como te digo quizá el te quiere ayudar de una buena manera - acarició su mano y Bosco hizo una mueca.

- No lo sé, apenas y lo conozco no soy de confiar tan rápido en la gente.

- Piénsalo Bos, es una señal de que tienes que salir de tu zona de confort. - sonrió y se retiró del lugar.

🍃🍃🍃

Pepa se encontraba acostado checando sus redes sociales, cuando escuchó la puerta de su habitación ser tocada.

- Soy yo - dijo Paz detrás de la puerta.

- Pasa tía - contestó Pepa acomodándose en su cama.

- Hola sobri no había tenido tiempo de venir a saludarte y me enteré que el Lunes empezaste clases, ¿cómo te fue en la semana?

- Pues bien dentro de lo que cabe, tengo la materia de Artes y es lo más interesante que existe.

- Sé mucho lo que amas el arte sobri y me da mucho gusto que tengas una pasión - sonrió.

- Gracias tía, mi más grande sueño es tener mi propia escuela de pintura en el extranjero, volar y ser libre.

- Y lo vas a lograr sobri ya verás - acarició su pierna.

Mireya estaba detrás de la puerta, estaba apunto de entrar cuando escuchó lo que había dicho su hijo. ¿Pepa quería abandonarlos?