Capítulo 16: Comida china y preguntas.

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POV Lisa

Después de decidirnos y pedir comida china, tuvimos que esperar un rato y cuando la comida al fin llegó, fuimos todos a la cocina, dónde había una preciosa isla de mármol en medio, con unos taburetes alrededor, los chicos se acomodaron en ellos y yo me puse a buscar algunos platos y cubiertos, pero como aún no estoy familiarizada con el lugar no los encontré.

— Creo que los platos estaban por aquí — recordó Liam, y estirando su brazo sobre mi cabeza abrió uno de los gabinetes del mueble y agarró algunos platos, los puso sobre la mesa y luego abrió uno de los cajones de abajo y sacó cuchillos y tenedores, después le pasó a los niños para que comieran.

— Así que vivías aquí cuando eras niño? — preguntó Lizzy sirviéndose un poco de los fideos chino.

— Así es — respondió dejando escapar un suspiro, como si recordar eso lo entristeciera.

— Vivías con tus padres? — quizo saber Leah, llevando un bocado de su comida a la boca, Liam tragó saliva y luego respondió.

— No, los primeros años viví con mi madre, pero ella murió cuando yo tenía 7 años y fue entonces que mi abuelo me trajo a vivir aquí.

— Solo? — preguntó zoey abrumada por la posibilidad mientras tragaba su cena.

— No princesa, tenía una niñera, ella me cuidaba la mayor parte del tiempo, hasta que tuve la edad suficiente para cuidarme yo solo, por supuesto — señaló.

— Y no tenías un papá? — está vez fue Zack quien preguntó antes de llenarse la boca con fideos.

— Oye, despacio cariño — murmuré.

— Lo siento mami, es que tengo hambre — expresó tratando de tragar lo que tenía en la boca.

— Entonces tenías papá o no? — insistío Leah.

— Si, pero el tenía otra familia, y vivía con ellos en su casa, y yo no era muy bienvenido allí, así que cuando pude me mudé y me fuí a vivir solo.

— Y que hay de tí Lisa? — preguntó Lizzy y debo reconocer que su pregunta me tomó por sorpresa, así que suspiré profundo y respondí.

— Bueno, mi madre se fué cuando yo tenía 5 años y no la he visto desde entonces — fue lo que dije y luego me quedé en silencio.

— Creo que son suficientes preguntas por hoy? — excusó Liam al darse cuenta de que la pregunta me dejó algo tensa, lo cierto es que es un tema algo delicado para mi y por eso no me gusta mucho hablar de ello.

— ¡Diablos, veo que a todos nos tocó unos padres de mierda, quien lo diría! — expresó con sarcasmo Lizzy.

— Elizabeth!! — la reproché, aunque en el fondo tuviera mucha razón.

— Pero es verdad! — añadió Leah — nos dejaron solos.

— No es tan malo estar solo — insinuó Liam.

— Claro, tú dices eso porque eres rico! — alegó Lizzy.

— Y creés que por que tenía dinero, podía hacer todo lo que yo quisiera?.

— Y qué, acaso no fue así? — pregunté con voz burlona y esbozando una sonrisa divertida.

— Pues no, como yo aún era menor de edad, todo el dinero era de mi abuelo y tenía que hacer todo lo que él decía si quería conservar mis privilegios ya sabes... — dijo guiñándome un ojo — hasta que un día discutí con mi abuelo por algo que pasó.

— Y que fue lo que pasó? — preguntó Lizzy cada vez más intrigada con su historia.

— Mi abuelo quería que me casara con una mujer que ni siquiera conocía — relató cruzando su mirada con la mía, yo sonreí, después de todo nosotros hicimos lo mismo, que ironía — se molestó tanto cuando le dije que no, que no me volvió a hablar por un tiempo y después de eso me descubrió disfrutando de un trío, justo aquí en esta casa — confesó con una sonrisa sinica y nostálgica a la vez.

— Iuuk!!, demasiada información! — expresó Lizzy asqueada.

— Qué es un trío? — preguntó de pronto Zoey arrugando las cejas por la confusión, estábamos tan consentrados en nuestra conversación, que nos olvidamos por completo, que los pequeños estaban presentes, todos fijamos la vista en Liam.

— Ehh... — balbuceó.

— Vaya, esto sí que será divertido! — manifestó entre risas Lizzy.

— A ver... cómo te lo explico...mmm ya se, es como cuando tienes un juguete nuevo y otros niños, quieren jugar con tu juguete, pero todos al mismo tiempo que tú — trató de argumentar Liam — me entiendes, princesa?.

— Creo que no — expresó zoey meneando la cabeza más confundida que antes.

— Es mejor así — resalté.

— Eso ni siquiera tiene sentido! — opinó en voz alta Leah, tragando el último bocado de su cena.

— Shhh!, tú solo termina tu cena, niña lista! — replicó Liam y la empujó con los hombros bromeando con ella y Leah le devolvió el gesto sonriendo.

Seguimos así por un buen rato, tratando de conocernos mejor unos a otros, ya que desde ahora deberíamos aparentar ser una familia de verdad, y no, solo un grupo de desconocidos.

— No tienes hambre? — preguntó Liam, sacándome de mis pensamientos.

— No mucho — respondí, observando la pantalla de mi teléfono que ya marcaba las 9 pm, así que le ordené a los niños que suban a cambiarse de ropa y a lavarse los dientes antes de ir a la cama.

Una Familia Por Contrato Donde viven las historias. Descúbrelo ahora