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Momo llego al campo de fútbol del campus universitario. Una gran multitud llena ya las gradas del público. Se dio cuenta de que Sana no le había dado punto de encuentro, así que le envío un mensaje mientras la buscaba.

Busco la cara conocida de Sana, pero en vano. Es difícil, ya que todo el mundo lleva la cara maquillada para animar al equipo de la universidad.

Sana no había respondido su mensaje todavía. Momo intento llegar a los vestuarios.

La multitud la empujaba. Las puertas estaban llenas de gente que intentaba entrar en el estadio, salir parecía casi imposible para Momo. Se paro a pensar. Si abandonaba el estadio ahora, era poco probable que pueda volver a entrar. ¿Y si su suposición era errónea?

Miro su teléfono. Aún no había respuesta de Sana. Empezó a deambular sin rumbo por las gradas del público.

Como Sana no respondía sus mensajes, intento llamarla. No contesto, pero ella siguió intentándolo. Momo se comenzaba a sentir un poco ansiosa: ¿Qué estaba pasando? ¿La habrán atrapado? Se preguntaba.

El partido estaba a punto de empezar. Todo el mundo llegaba a sus asientos. Momo no sabía que hacer, pero hizo lo más lógico, busco un asiento.

El lugar estaba muy concurrido y no quería quedarse cerca de alguien que hiciera mucho ruido, por si Sana le devolvía la llamada.

Tardo mucho en dar vueltas, pero al final encontró un sitio un poco aislado del resto del público. Se sentó y observo el campo mientras empezaba el partido.

La japonesa siguió llamando a Sana sin rumbo. Hasta que le rechaza la llamada.

—¿Hola? —Llegó Sana encubierta, con lentes y la cabeza baja

—¿Por qué no contestas el teléfono? ¡Me preocupe, Minatozaki!

—Aww, siempre es tan dulce saber lo mucho que te importo, nerdy —Sana sonrió con ternura

Momo rodó los ojos —¿Dónde estabas? ¿Qué es lo que hacías?

—No voy a decirlo. Conociéndote, intentarás hacer alguna heroicidad para detenerme —Sana negó

—Lo que realmente me hace pensar que eso es lo que debería estar haciendo —Momo comenzaba a enojarse un poco— ¿Dónde estabas?

—No lo diré, así que deja de preguntar —Dijo acomodándose sus lentes oscuros— Te enviare una pista, pero eso es todo

Momo miro su celular: Sana le había enviado algo. Se metió a su chat y luego miro a Sana.

—Te ves sexy y todo pero... —Volvió a mirar la foto— ¿Qué mierda estas haciendo?

—Te lo dije, esta es la única pista que vas a obtener de mí —Le dio una sonrisa con malicia— Ahora puedes sentarte y disfrutar del espectáculo

—¿Qué espectáculo estás planeando? —Preguntó preocupada— No me digas...

Momo pensó... ¿Qué es lo que Sana podría estar haciendo sola en ese lugar? O lo encontró como punto para un encuentro sexy con un chico... ¿Pero por qué mantendría eso en misterio?

Tal vez para poner celoso a Taehyung. Pero no, no es eso. Sana nunca quiso vengarse de Tae. Quiere vengarse de Nayeon.

—¿Todo bien? —Sana la miro con curiosidad, la japonesa se veía muy pensativa

—Tienes algo sucio sobre Nayeon, ¿Verdad? —Dijo sin mirarla— No mientas

—Eres muy lista, Moguri —Sana le sonrió levemente

—Voy a buscarlo —Momo la miro por fin— No voy a permitir que te hagas daño por este tonto plan

Momo con enojo se levanto y se dirigió hacia la salida, no sabía que haría, pero algo tenía que hacer.

DDPTUC - Samo TwiceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora