11. Con él

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Blanca


Menuda noche. No conté exactamente cuánto tiempo estuvimos llamando.

Reconozco que es un pecado nunca probar la pasta carbonara pero lo de Nazaré es otro nivel.

Chiquilla, eres tonta

Nazaré, una ciudad de Portugal que es muy bonito y es reconocido por tener las olas más grandes, donde muchos surfistas lo aprovechan.
En el tiempo en el que fui, toda mi familia lo probó menos yo, me dolía la pierna.

Cómo dijo Álvaro, doña excusas

Vale, vale. Me daba cosa ahogarme.

Pasta carbonara, eh....
Si un día por la mayor casualidad me la pide, se la haría encantada.

He de admitir que he pasado un buen rato, me sentía yo misma.

***

Revisé en la agenda lo que teníamos que hacer para el lunes.

Problemas de genética. Qué mierda de temario.

Cuando ya estaba llevaba dos problemas, hechos con esfuerzo, sudor y lágrimas.

Hija, has buscado un PDF de problemas de genética con solucionario.

Cuenta igualmente.

Me vino un mensaje.

En mi interior pensaba que sería Álvaro, entonces saqué una sonrisa.
Cuando lo encendí, me sorprendió e iba quitando aquella sonrisa. Me entraron nervios.

Eduuu: T veo en 5 mins en tu portal.

No me lo esperaba. Qué sorpresa.

No me esforcé mucho en la ropa que iba a llevar.

Cogí lo primero que vi en el armario, una sudadera negra y unos pantalones de campana blancos.

Me puse unas botas y ya que la sudadera venía con un bolsillo, guardé allí el móvil y las llaves de casa. Solo le avisé a Jorge que me iba. Confío en que me cubra.

Sentía como una sensación rara. Buena y mala a la vez.

Salí con tranquilidad y estaba allí él.

—Vas hermosa, como siempre —me sonrió.

Yo sonrojé un poco.
Iba con una mierda de outfit.

—¿Qué estabas haciendo ahora mismo? —preguntó.

—Yo estaba haciendo deberes de Biología.

—Como veo es muy divertido el bloque científico.

—Que conste algunas cosas están bien. Os de Biología nos quedamos una hora entera sin vosotros, eso es un milagro.

—¿Y qué quieres ser de mayor?

Esa pregunta desde siempre, muy pequeña he querido ser doctora. Lo típico.

Qué pena que seamos un clichéDonde viven las historias. Descúbrelo ahora