Maldición Asesina

Capítulo 15

                             AUGUST

Todo bien con Ethan aunque creo que Elara a estado haciendo mal su trabajo, le pedí que le echara miedo y lo hiciera creer que es un acesino pero no ella tratando de calmar los aires con consejitos estúpidos.

Estuve tan entretenido últimamente que había olvidado que había recibido la llamada de mi querido amigo que ya tenía mi encargo listo.

No había tenido tiempo de pensar en ese chico, ahora me caía más mal de lo normal Emily me contó que tuvo un novio y por la descripción supe inmediatamente que era el.

—¿Estas bien?—la voz de Emily me saco de mis pensamientos.

—Claro.—le sonreí.—¿Que haces aquí?

—Te extrañaba.—puso una sonrisa angelical.—Es algún pecado extrañar a mi novio.

—Claro que no, ven aquí.—sonreí y le hice seña para que se acercara.—Yo también te extrañaba aunque te haya visto hace dos horas.—sonreí.

La tome del brazo dándole un tirón hacia mi, calló a la cama y comenzó a reírse a carcajadas.

—Oye eso es muy mal educado.—me dio un pequeño golpe en el hombro.

—A si y dime esto también es mal educado.—me incliné hacia ella y le di un corto beso en los labios.

—Bueno si es un poco mal educado pero me gusta.—sonrió.

—Quédate conmigo esta noche.—le acaricié la mejilla.

—Pues claro si me lo pides de esa forma no puedo negarme.—sonrío.

Nos acomodamos en la cama y nos quedamos abrazados como una pareja feliz.

Ya la tengo es mía solo mía.

𝐒𝐢 𝐪𝐮𝐞𝐫𝐢𝐝𝐨 𝐞𝐬 𝐭𝐮𝐥𝐥𝐚 𝐩𝐞𝐫𝐨 𝐫𝐞𝐜𝐮𝐞𝐫𝐝𝐚 𝐪𝐮𝐞 𝐭𝐞𝐧𝐞𝐦𝐨𝐬 𝐮𝐧 𝐩𝐥𝐚𝐧.

Por supuesto el plan antes de todo.

                                       ***
Desperté antes que Emily y salí de la habitación, fui a la cocina a por una taza de café y luego subí en dirección a la habitación de Ethan.

Di dos pequeños toques en la puerta de la habitación (toc toc). Un minuto después Ethan abrió la puerta, tenía ojeras que se le notaba muy oscuras en los ojos.

—¿August?—me miro confuso.—Ee pasa.—se hizo a un lado y entré en la habitación.

—No te he visto en éstos días.—volteo a verlo.

—Es que no he estado muy bien.

—Si te entiendo, debe ser duro cargar con el peso de un asesinato.

No respondió y noté que mis palabras sí que hicieron efecto en el.

—Sabes es algo peligroso puedes ir preso, bueno solo si dices algo de eso.

—De seguro la policía encontró el cuerpo y están investigando.—sus nervios comenzaron a aumentar.

—Seguro pero no hay pruebas mientras no digas nada todo va a estar bien.—sonreí.—bueno yo me tengo que ir solo pasé a verte, sabes es mejor que reanudes tu rutina diaria y hagas como si nada para que no despiertes sospechas.

Me dirigí nuevamente a mi habitación, al entrar Emily estaba sentada en la cama, al parecer acababa de despertar.

—Buenos Días princesa.—la beso en los labios.