Capítulo 10

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                         AUGUST

Desde el primer momento en que la vi quedé fascinado por su belleza. Era la chica más hermosa que había visto.

El día que llegó cómo empleada a casa me sentí a gusto porqué la tendría cerca, trate de acercarme a ella varias veces pero la chica no es nada fácil.

Y así me gusta que sea difícil de conquistar pero se que de todas formas será mía. Por eso elaboré el plan perfecto para acercarme a Emily.

La escuché hablar hace unos días en la cocina que les gustaban los animales principalmente los gatos.

Y sí la he estado espiando un poco, eso suena como acoso pero no solo quería saber más de ella.

Conseguí un maldito gato el que apuñale dos veces y lo dejé en el pasillo justo por donde debería para Emily.

¿Se preguntarán cómo sabía que ella lo vería?

Bueno ella acostumbra a nadar en la piscina en la noche, cosa rara pero investigué y lo hace para mantener una buena figura física, cosa que no entendí pero da igual.

Dejé el gato en el medio del pasillo minutos antes que ella pasara de camino a su habitación. Estuve pendiente todo el tiempo hasta que la vi aparecer por el pasillo y fue cuando el gato en su último respiro se movió un poco y ella lo notó.

Se acercó al animal y se agachó para agarrarlo y cuándo ella notó que la sangre corría por sus manos soltó un chillido.

Rápidamente salí de mi habitación para hacer acto de mi presencia y ser el salvador de la noche. No conte con que Ethan y Elara estuvieran despiertos y salieran al pasillo a arruinar mis planes.

—¿Que a sucedido?—Ethan se acercó rápidamente a Emily mirando sus manos.—¿Eso es sangré?.—hizo una mueca de horror.

—El...el...el gato.—balbuceo Emily bajando la mirada al suelo donde se encontraba el cuerpo del animal sin vida.

Elara y Ethan miraron en la misma dirección.

—¿Que es eso?—dijo Ethan con cara de horror.—¿Que le ha pasado?

—Estaba así cuando pasaba por el pasillo.—dijo Emily mientras una lágrima se deslizaba por su mejilla.

Me acerqué un poco a ella quité la lágrima de su rostro, ella me miró con confusión pero no dijo nada. Elara me miraba con mala cara pero tampoco dijo nada.

—Yo me encargaré de esto.—rompí el silencio y señalé el cuerpo ensangrentado del gato.

Ethan asintió y ayudó a Elara hasta su habitación, miré a Emily que tenía cara de horror y noté las lágrimas callando por sus mejillas.

—Tranquila no pasa nada.—dije poniendo mi mano en su hombro.

—Pobre animal, ¿que le a pasado?—dijo casi en un susurro.

—No lo sé.—respondí inocentemente.—Ven te ayudó a llegar a tu habitación para que puedas lavarte, luego me encargó de esto.

Ella asintió y caminamos en silencio por el pasillo, solo se escuchaban los sollozos de Emily.

Entramos en la habitación y le acompañe hasta el baño a lavarse las manos.

La dejé a solas para que entrara en la ducha y me senté en su casa. El olor que tenían sus almohadas era tan dulce y empalagoso que me hacía sentir náuseas.

Revisé algunos de sus cajones observando sus pertenencias y encontré un foto, una foto en la que se encontraba Emily abrazada a un chico.

¿Quien es este imbecil?

Maldición AsesinaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora